San José, 14 Ene (Elpaís.cr) – El Presidente de la República, Luis Guillermo Solís, salió este martes a avisar que no hay interés en su Gobierno de ofrecerle a funcionarios embajadas en el extranjero «como botín político».
El mensaje lo envió el Presidente luego de que se filtrara que el viceministro de la Presidencia, Daniel Soley, le habría propuesto a la Procuradora General de la República, Ana Lorena Brenes, un puesto en una embajada para frenar la «incomodidad» que sus posicionamientos han representado luego de un presunto alejamiento entre la institución y Casa Presidencial.
El presidente Solís declinó referirse a la presunta oferta de Soley, a pesar de que mencionó que «no hay pruebas» de este hecho, y aseguró no estar enterado de que el viceministro y la Procuradora se reunieron el martes anterior, donde surgió el rumor.
Por ello, el mandatario aseguró que la Presidencia de la República va a «desmentir esa intención» de ofrecer la embajada y que es por eso que también sostuvo una conversación este lunes con Brenes para «aclarar el tema», y tratar también «una agenda muy amplia que se tiene con la Procuraduría», según detalló el mandatario.
El viceministro Soley aseguró a medios nacionales que la posibilidad de la embajada se planteó en nombre de la Presidencia de la República, hecho desmentido por Solís este martes, ya que «por su gran trayectoria» se estaría buscando «considerarla en otro ámbito de la función pública”.
La polémica se desató porque la Procuraduría General de la República ha fallado en dos ocasiones en contra de la administración actual, iniciando con el tema del Mercado de Artesanías y el levantamiento del veto a la calle 19 bis en San José, y también con el caso de si el ministro Melvin Jiménez debía o no tener ese puesto debido a ser obispo de la Iglesia Luterana y algunos sectores pensaron que podría ser una estrategia del gobierno para deshacerse de Brenes.
La Procuradora fue elegida en 2010 y le queda aún un año y 4 meses de gestión.