San José, 6 oct (EFE).- Latinoamérica debe apostar por una estrategia regional que fortalezca la coordinación entre los Ministerios Públicos y la creación de equipos multidisciplinarios, con el fin de combatir el crimen organizado en todas su formas, opinó hoy una fuente oficial.
El fiscal general de Ecuador y presidente del la Asociación Iberoamericana de Ministerios Públicos, Galo Chiriboga, declaró a Efe que es necesaria una «estrategia mucho más internacional» en la región.
«Lo que hemos hecho hasta ahora es enfrentar el crimen organizado solo en los países y hemos desconocido la perspectiva que tienen en lo trasnacional porque las bandas criminales no operan en un solo país. La justicia debe adoptar una estrategia mucho más internacional», afirmó Chiriboga.
El funcionario ecuatoriano se encuentra en Costa Rica, donde participa en el Congreso Criminalidad y Sistemas de Justicia Penal en América Latina y el Caribe, que se enmarca en la celebración del 40 aniversario del Instituto Latinoamericano de Naciones Unidas para la Prevención del Delito y el Tratamiento del Delincuente (ILANUD).
A esta reunión asisten jueces, fiscales, académicos y otros funcionarios judiciales para debatir acerca de los avances y desafíos de la región.
Para Chiriboga, este encuentro es un «importante espacio para discutir los retos de los Ministerios Públicos en este siglo» y para proponer iniciativas de colaboración entre los países para el combate al crimen organizado.
«Estamos trabajando en procesos de unificación de investigaciones. En temas como la trata de personas creemos que es posible crear equipos conjuntos de investigación en los países que sufrimos esa pandemia», manifestó.
El fiscal ecuatoriano dijo que ha propuesto a sus colegas de la región que se conformen equipos de trabajo que elaboren acciones específicas contra el lavado de activos, la trata de personas y los crímenes cibernéticos.
«La idea es que todo el esfuerzo de los fiscales iberoamericanos estén concentrados a enfrentar esos delitos en los próximos seis años», comentó.
La coordinación internacional, dijo Chiriboga, requiere de «voluntad» y aseguró que eso ya se está viendo en la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), la cual está analizando la creación de una corte penal para esa región.
También destacó los esfuerzos que ha realizado Centroamérica para conformar iniciativas regionales sobre seguridad y lucha contra el crimen organizado.
«La banda trasnacional opera sin las limitaciones que tiene la justicia. Tenemos que pasar del concepto de frontera territorial al de una frontera ‘delictual’, que une a países que no tienen fronteras territoriales», expresó.
El fiscal ecuatoriano urgió a «afrontar esto de una manera más global, con equipos conjuntos multidisciplinarios de investigación del crimen organizado».
Además, dijo que es «un error» llevar a cabo las investigaciones solo desde la perspectiva jurídica, pues la evolución del crimen organizado obliga a incluir politólogos, sociólogos y analistas de política criminal para «enriquecer las investigaciones».
En cuanto al combate al narcotráfico, Chiriboga afirmó que los países latinoamericanos están en la obligación de «perseguir» ese delito, pero que también los países que suponen los grandes mercados deben «hacer un esfuerzo» al tratarse el tema de una «responsabilidad compartida».
«Hay países en donde los recursos financieros producto del narcotráfico se lavan y ahí tenemos que aportar para que no solo se observe el delito, sino analizar los recursos inmensos financieros que se lavan en sistemas bancarios», manifestó.
El Congreso Criminalidad y Sistemas de Justicia Penal en América Latina y el Caribe comenzó el ayer en San José y concluirá mañana. EFE