Santiago de Chile, 9 may (Sputnik).- El presidente de Bolivia, Evo Morales, debería preocuparse de sus fronteras y dejar que Chile se ocupe de las suyas, dijo este lunes el ministro de Defensa chileno, José Antonio Gómez, en respuesta a las críticas del mandatario boliviano sobre la instalación de una base militar chilena cerca de la frontera binacional.
«Que él se preocupe de sus fronteras y nosotros nos preocuparemos de las nuestras», dijo Gómez, citado por el diario chileno El Mercurio.
Morales calificó el domingo de «agresión» la instalación de una base militar chilena a 15 kilómetros de la frontera con Bolivia, cerca de las disputadas aguas del manantial Silala.
«Tenemos y hemos sido claros en el mundo de tener una visión de paz, no queremos conflictos y el único que genera conflicto es el señor Morales respecto de Chile, nosotros tenemos la tranquilidad y seguiremos en ese camino», aseguró el funcionario chileno.
El ministro de Defensa desmintió que Chile sostenga un doble discurso sobre la instalación de una base, tal como afirmó Morales.
«Tenemos algunas fuerzas desplegadas, pero no estamos hablando de regimientos, sino de algunas unidades trabajando en prestaciones de salud, en colaboraciones en el ámbito de la ingeniería, construyendo caminos», argumentó Gómez.
El presidente de Bolivia se había referido a la «contradicción» de Chile, ya que mientras el ministro de Defensa reconocía la existencia de una base militar, el canciller Heraldo Muñoz negaba su existencia.
El 23 de marzo Bolivia acudió a la Corte Internacional de Justicia para defender su soberanía sobre el manantial del Silala.
La Paz argumenta que las aguas nacen en territorio boliviano y son injustamente bombeadas y explotadas por empresas chilenas.
Chile, por su parte, alega que se trata de un río binacional y por lo tanto sus aguas son de carácter internacional y están sujetas a los arreglos correspondientes para el uso compartido. (Sputnik)