Columna Poliédrica
Lo sucedido con el ciclista Andrey Amador y un policía de tránsito merece un gran aplauso. No obstante, el aplauso no es para ninguno de estos personajes sino para los padres del ciclista; en otras palabras, los que merecen el mayor reconocimiento son el papá y la mamá de un deportista que tuvo la creencia que todo el mundo o, para ser más realistas, todos los costarricenses, tenemos la obligación de reconocerlo y rendirle tributo. ¡Error!
Ojalá que todos los deportistas de este país comprendan que ellos no son más que ningún otro costarricense. Entre estos personajes, pareciera, que la vanidad ocupa un lugar muy importante en sus vidas; se trata de personas que tienen la creencia de un mundo que gira alrededor de ellos, es decir, consideran que son como Luis XIV y que las demás personas debemos adorarlos como si fueran soles indispensables para nuestras vidas. ¡Error!
Normalmente son los futbolistas los que se comportan de este modo, ya que son los que salen más en los medios de comunicación y les pagan más dinero. A lo largo de la historia de ese deporte ha habido infinidad de casos de desubicados que se consideran la mamá de Tarzán y no son ni Chita la mona; sin embargo, que este comportamiento lo tenga un ciclista resulta toda una novedad y ello se debe a los logros que Andrey Amador ha tenido a nivel internacional.
No obstante, por más pergaminos que tenga este ciclista, hubo dos personas que entendieron lo fuera de lugar de su comportamiento. En efecto, no es raro encontrar padres de familia que ante semejante exabrupto pretenden defender lo indefendible; sin embargo, en este caso, sucedió todo lo contrario y los padres de este deportista tuvieron la sapiencia de hacerle ver que había actuado como un arrogante y que se le habían ido los humos a la cabeza.
La gran lección de este episodio fue ver a los padres de Andrey Amador, haciéndole ver su error y obligándolo a ofrecer disculpas públicas por lo que había hecho. En la actualidad hay padres de familia que si el profesor de primaria o secundaria les dice que su hijo ha actuado incorrectamente, lo que hacen es justificar las conductas equivocadas y reclamarle al profesor por haber tenido la osadía de denunciar a su hijo.
La conducta del padre de familia alcahuete se ha vuelto muy frecuente en nuestros tiempos. Antes cuando el profesor le decía al estudiante que iba a mandar a llamar a su papá o mamá, ello era motivo de preocupación; empero, en la actualidad ello no significa nada para cualquier estudiante, por el contrario, ante la denuncia del profesor, los padres de familia suelen cuestionar la autoridad del docente y se ponen, irresponsablemente, a favor de un hijo que se comporta de manera incorrecta en sociedad.
El padre y la madre de Andrey Amador hicieron lo que debían y ojalá que otros padres de familia aprendan de ellos y se comporten de manera similar. A los hijos se les debe educar para que entiendan que deben comportarse de manera adecuada en sociedad y que los triunfos de la vida no les brinda una patente de corso para comportarse petulantemente; mis respetos para los padres de este ciclista que supieron corregir y hacerle ver a su hijo que la conducta de agrandado no era la que ellos le habían enseñado.
No conozco ni al padre ni a la madre de Andrey Amador, pero la enseñanza que nos han dado a todos los costarricenses no tiene precio. Ojalá que todos los padres de familia entiendan que amor a sus hijos, no es alcahuetear cualquier tipo de conducta que vaya contra las enseñanzas adquiridas en el hogar.
¡En buena hora por los padres de Andrey Amador!
(*) Andi Mirom es Filósofo
12 Comments
Jaime Lopez Vargas
El asunto en cuestion refleja la mentalidad e idiosincracia del costarricense.
Como nos han metido desde niños que todos somo igualiticos,inclusive el que sobresale debe mantenerse bajo el radar para no crear envidia ni que le pongan el ojo.
Yo si creo que Andrey cometio un error al practicar ciclismo en la autopista.Ese ciclismo que puso el nombre de Costa Rica en alto en Italia y los giros europeos.Ese mismo que nos hace sentirnos orgullosos de nuestro pais y sus hijos,y estimula que muchos empiecen y continuen haciendo ese deporte.
Pero al hombre lo aterrizaron ,le hicieron ver que en nuestro pais,nadie es nadie,ni por encima de los demas.Todos somos socialistas,iguales , mediocres y exitosos.He ahi el dilema.
Asi como creo que cometio un error,el trafico si debio darse cuenta de quien era Andrey,pararlo,conversar con el y hacerle ver que esta infringiendo la ley y que su vida corre peligro.Pero de ahi a multarlo y quitarle la bicicleta si me parece excesivo para un pais donde necesitamos heroes.
Jorge Cabezas
Quitarle la bicicleta y hacerle un parte es lo que establece la ley y eso no es excesivo.
Yerlin Angulo
Completamente de acuerdo, de lo contrario la ley sería parcial lo cual fomentaria la irresponsabilidad y la deshonestidad…nos se puede con las escalas de grises, nos han dejado muchas desgracias.
Fernando
Excelente comentario!
Anab
De acuerdo con su comentario, y….pobrecito el tráfico que se sintió ofendido y esconde la parte del video donde maltrata la bicicleta de Andrey. Este incidente debió enfocarse en el poco apoyo a los que si luchan entrenando día a día y si hubieran facilidades deportivas, no habría necesidad de usar la autopista.
Hernan
Si ve y escucha bien el videi, el policía le dice no lo paro para multarlo es para hablar con ud, pero se puso de malcriado y alli le dijo que le iba a decomisar la bicicleta y hacer la respectiva multa
María
Excelente!!! Ojalá todos los padres actuarán así,aun cuando su hijo tuviera 50 años, su deber es hacerle ver el error que está cometiendo.
Alguien cansado de tanta burrada.
En un país de mediocres, de ignorantes y de analfabetas funcionales, cualquier hijo de vecino, que por suerte o por habilidad destaque en cualquier campo que no necesite largos estudios y disciplina intelectual, se convierte en una diva,¿ vanidosa, pero continúa siendo insustancial. Si no veánlo en los que se consideran a sí mismos celebridades porque salieron en un programa de televisión haciendo o diciendo alguna burrada, o porque cantan como si les estuvieran arrancando los pelos a mano limpia, o cualquier tontería así. Y me pregunto, dónde están los verdaderos creadores artísticos, los intelectuales, los investigadores…. ésos son las verdaderas luminarias de este país. Pero no, la prensa no les pone atención, porque no venden sus medios para la masa ignorante.
Ramón Barrios
No señor, está muy equivocado con el enfoque de su artículo. Todo me hace indicar que usted es de esos padres alcahuete que no le gusta que alguien más corrija los errores de su hijo. El oficial de tránsito merece un reconocimiento por la aplicación de la ley, cumplía con su trabajo. Pero este insolente y prepotente muchacho juega vivo insultando a un oficial violando todas las reglas y menospreciando su trabajo. Que más podría hacer el papá aplaudirlo, error!!! como usted dice. Era defender lo indefendible, no veo lo aplaudirlo en ello.
Marta Duarte
Todos los puntos de vista, a mi parecer, tienen algo de verdad… al igual que otros tantos no lo son totalmente. En mi forma de ver… Tanto Andrey como el tráfico, se excedieron, en el cumplimiento de su «deber» (Andrey en su entrenamiento y reconocimiento de su labor y el tráfico en no reconocerlo y provocar su enojo, tomando luego una actitud revanchista). Creo que en el calor de los hechos,todos o cualquiera hubiese reaccionado más o menos parecido a ambos.
Además, si reconozco la posición de los padres, que no soltaron el lápiz en este asunto y aplicaron, lo que a todas luces se nota, una buena educación a su hijo (aunque se haya salido de sus casillas. Pero a la vez, me inclino a ver en Andrey un punto muy positivo, y es que acató la amonestación de sus padres dócilmente, debemos reconocer que actualmente, nuestra juventud, no lo es tanto, aunque en buenos términos les expongamos nuestra disciplina.
Así que, Andrey pudo no haber acatado lo que sus padres le indicaban y continuar hasta «las últimas consecuencias», sino más bien que se retractó.
Vuelvo a repetir, es de humanos equivocarse, de sabios reconocerlo y de humildes corregirlo.
Jean Paul El Semaani
Excelente comentario, muy acertado a mi gusto.
Luis
Me parece igual de exajerado que se diga que todos los ticos atletas de alto rendimiento son iguales, con todo el respeto a la opinión ajena claro, conosco atletas muy humildes, conosco atletas que son tan imperfecto como nosotros, conosco personas que no tienen ni donde caer muertas y se comportan peor de arrogantes, conosco personas que tiene mucho dinero, profesionales que son muy nobles.
Como dicen hay de todo en la viña del señor, Andrey es muy joven aún, y esperemos que en el proceso de aprendisaje haya entendido el mensaje, posiblemente recapacite sobre lo que hizo mal y aprenda, al final todos seguimos aprendiendo, me parece muchisimo más arrogante el que cree que es perfecto, el que no se equivoca, el que cree que tiene la utoridad para señalar la falta de los demás, hasta de eso muchos de nosotros también tenemos que aprender que es falta de humildad.