Columna Poliédrica
Al leer en estas semanas atrás lo que ha ocurrido con el Grupo Nación y Televisora de Costa Rica, pensaba que en otros artículos ya nos habíamos referido a las acciones de estas y otras empresas. En ese sentido, para nada, estamos tratando un fenómeno nuevo; al contrario, ya nosotros y otros estimables articulistas han puesto el grito en el cielo con esta situación, sin embargo, la gente está en otras, no pasa nada y los que no pagan impuestos felices.
Por ejemplo, hace más de un año, en un artículo de agosto de 2015, escribimos lo siguiente:
“ (…) Ahora bien, el problema de fondo y este es el aspecto medular de la cuestión, es que la carga tributaria de Costa Rica está sobre los hombros de los trabajadores y de los que menos tienen. Lo está porque hay empresarios, profesionales liberales y una serie de actividades que no pagan los tributos que tienen la obligación de pagar; dicho de manera clara y simple: ¡Los que más tienen no pagan los impuestos que deben pagar!
Muchas empresas y sus accionistas, escudados en sociedades anónimas que reportan un balance anual con pérdidas o ganancias paupérrimas, no pagan un cinco del impuesto a las utilidades o dividendos generados por sus empresas. Una buena cantidad de estos empresarios que despotrican contra los trabajadores, por ejemplo, andan solicitando facturas en las gasolineras para pasar el gasto en gasolina de su vehículo particular, como un gasto de la empresa.
Contratan escudos fiscales para que estos les facturen compras inexistentes que luego introducen en el balance contable como gastos realizados por la empresa. Ya no se diga de la evasión que realizan con sus cuentas en diferentes países fuera de Costa Rica, paraísos fiscales, en los que mueven grandes cantidades de dinero sin pagar un solo colón al Estado costarricense.
Desgraciadamente estos y otros mecanismos utilizados por estos y otros defraudadores, son de difícil comprensión para el común denominador de los mortales y eso unido al fomento de una sociedad preocupada por lo superfluo, hace que estos personajes hagan de las suyas sin que reciban el reproche de la mayoría de la población.
Y es que, lamentablemente, la clase económica acomodada de Costa Rica se ha acostumbrado a no pagar impuestos y gozar de la más absoluta impunidad. (…)”
Asimismo, en otro artículo de enero de 2016, en relación con la evasión de impuestos expresamos que:
(…) En ese sentido, me parece importante señalar un par de las formas que estos grupos utilizan para evadir al fisco. Obviamente, dadas las limitaciones de espacio de esta columna, únicamente señalaré las más conocidas; empero, sobra decir, que existen muchas otras que se esconden en los diferentes mecanismos financieros que han surgido a lo largo de los años.
El primero tiene que ver con la modificación de los estados contables a la hora de hacer las diferentes declaraciones ante el fisco. Se trata de aquellas prácticas en que una persona jurídica o física, declara pérdidas o ganancias menores con base en la manipulación que se hace de los estados contables; ello es posible porque la Tributación Directa u otros órganos de recaudación, no tiene capacidad para auditar a todas las personas inscritas y menos a las no inscritas conforme a la ley.
La realidad que acabamos de indicar da pie para que se utilicen las más variadas formas para lograr el objetivo de evadir al fisco. Por ejemplo, en muchos lugares donde se brindan servicios profesionales o se venden diferentes bienes sólo aceptan dinero en efectivo, esta práctica permite no contabilizar aquellos ingresos pagados por los clientes a los que no se les entregó factura; es decir, si el ingreso total fue de un millón de colones y las ventas o servicios de los clientes que no retiraron la factura asciende a novecientos mil colones, la declaración al fisco será únicamente por cien mil colones.
Unido a lo anterior, también se suele utilizar los denominados escudos fiscales para justificar contablemente la evasión que se le hace al fisco. Los escudos fiscales son sociedades anónimas u otras figuras jurídicas que en realidad no prestan ningún servicio o producen ningún bien, aunque sí tienen una existencia jurídica y en ese tanto tienen la capacidad de emitir facturas a empresas o personas físicas; en palabras sencillas, imaginemos una sociedad anónima cuyo nombre legal es “La computadora feliz S. A.” y que realizó los procedimientos para emitir facturas, pues bien, hay empresas, asociaciones, fundaciones y personas físicas que le solicitan a ese escudo fiscal que emita una o varias facturas por concepto de equipo de cómputo y por un monto total, vamos a suponer, de cincuenta millones de colones que van aparecer en la contabilidad como un gasto y en ese tanto, incidirá sobre el balance contable y en el monto que se declarara ante el fisco.
Para que quede más claro. Debido a lo difícil para el fisco de controlar las contabilidades de las diferentes personas jurídicas o físicas, ellas se valen de estos escudos fiscales para justificar contablemente gastos que nunca se dieron en la realidad; es decir, contablemente se consigna un gasto por cincuenta millones de colones y físicamente existen las facturas que justifican aquel gasto, sin embargo, en la realidad, el equipo de cómputo no existe y la tributación no tiene la capacidad para ir a verificar la existencia de esos activos.
Como se observa, el meollo del asunto está en la debilidad que tiene el fisco para controlar a quiénes deben de tributar. Evidentemente ello no sucede con los trabajadores, ya que la mayoría no tiene posibilidad de usar escudos fiscales para justificar el gasto de su salario, se trata de un burro amarrado al que se le capta el tributo en la fuente; en contraste con el tigre suelto, que no solo tiene la posibilidad de aceptar solo efectivo o utilizar escudos fiscales, sino que ahora puede echar mano de otros instrumentos financieros. (…)”
Y más recientemente, en abril de este año, escribimos que:
“ (…) En Costa Rica el no pagar impuestos, al parecer, no es sancionado socialmente. A diferencia de lo que sucede en otras latitudes (Noruega, Suecia, Finlandia, por ejemplo), el no pago de los impuestos no es objeto de rechazo; al contrario, en nuestro país hay una tendencia a promover esta práctica y hasta alabar o mostrar admiración por aquellos que lo hacen y no son sancionados.
Los que no pagan impuestos son los cargas, los vivos, los inteligentes y son las personas que debemos emular. En lugar de ser denunciados y sometidos a una sanción ejemplar, entre bambalinas se suelen poner como el ejemplo a seguir; en esencia, se tiende a justificar el no pago de tributos bajo el argumento que toda la recaudación es para el pago de los salarios de funcionarios públicos. (…)”
Casi todo a lo que hemos hecho referencia, se aplica a los casos de La Nación y de Televisora de Costa Rica. No obstante y a pesar de ello, la gente sigue comprando la basura que venden esos dos medios de comunicación y vuelven la cara ante las omisiones que han hecho ambas empresas en relación con sus obligaciones tributarias.
Todavía causa más cólera escuchar a personeros de estas empresas justificando lo injustificable. Nadie paga más de tres mil seiscientos millones de colones por gusto, evidentemente, en esta ocasión, se han visto obligados a hacerlo; no obstante, no siempre ello ha sido así y ello ha quedado claro para aquellos que quieren ver una realidad que está ahí.
¡No hay peor ciego que el que no quiere ver!
(*) Andi Mirom es Filósofo
16 Comments
R. C. B.
Este par de (empresas) hipocritas y vividores santulones (as) pretenden trazar la ejemplar moralidad que debe regir en el pais, pero lo que causan es nauseas.
Orlando Quesada
Hoy por hoy lo que se predica con el ejemplo es claro la clase de sociedad que vamos a formar mañana políticos corruptores y evasores asociados a un grupo mal llamado elite que busca auto beneficiarse a costa de los más desposeídos,si bien es buscado por los evasores los grupos organizados narcos tienen asidero por este tipo de acciones ,la justicia la pintan ciega pero los politicuchos la pintan minusválida y prostituible
luis
Lo que dice es mayoritariamente cierto.. Importante corregir ciertos conceptos, como el ejemplo brindado: si le compran 50 millones a «la computadora feliz S.A.», esta debe declarar también, especialmente porque la DGTD tiene un buen seguimiento a los Grandes Contribuyentes (a quienes les dedica un departamento completo). O sea, el pobre diablo que le vende a éstos, será altamente perseguido… Ah, y muy probablemente para usar las técnicas de «Escudos Fiscales» se use facturas de GASTOS, no de ACTIVOS (como lo sería una computadora) es diferente. Por otro lado, los «escudos fiscales» que bien aparecen en la literatura administrativa-contable (y no solo de este país) no son sólamente sociedades turecamente demoníacas. También hay mecanismos internos para hacer otros cambios en las formas contables de registrar movimientos (Valoración de inventarios, tipos de depreciación, etc.). Nada de esto es prohibido: la ley lo permite (y no solo acá). Estamos de acuerdo de que puede haber mala fé en muchos lugares, para no pagar impuestos, pero los mecanismos -legales- no tienen la culpa de lo que muchos inescrupulosos quieran hacer.
Marcos Contreras
Que ejemplo el de Teletica y La Nación para nuestras futuras generaciones, la mejor clase para evadir al fisco, tanto que persiguen las anomalías que se dan con los politicos, otras empresas privadas, las instituciones públicas y ellos estan igual o peores. Para hablar de otros se debe predicar con el ejemplo.
Fernando Pineda
Empresas y personas fisicas, ejemplo ofelia taitelbaum, descaradamente evaden impuestos. Y lo peor es que hasta hacen lo imposible para que no los juzguen, recurriendo a amistades en las instituciones publicas. Hay que señarlos y darles color.
Gio
Curiosamente aquí no salió Greivin Moya con sus «famosos» reportajes sobre las anomalías de las instituciones y empresas. Obviamente les conviene quedarse callados.
jose salas
El problema es q no hay un reproche social frente a este tipo de delitos. Cuando no se tributa lo q se debe, se le roba a todo el pueblo. Y parece q el sistema tambien protege a ese tipo de delincuentes. No ha habido un solo condenado por este delito.
R. C. B.
«Una de las cosas que los gobiernos temen es el día en que todo el pueblo junto se plante firme». «Una simple abeja es ignorada, pero miles juntas hacen correr de pavor aun al que se cree más valiente».
Jaime Lopez Vargas
Que interesante seria revisar las declaraciones de impuesto de la renta de los comentaristas del foro.Asi sabremos si como roncan duermen.
Carolina Quesada
Al señor Lopez Vargas: La mayoría de los que aquí comentamos y escriben, somos trabajadores que nos capturan el pago del impuesto en la fuente. No sería raro que paguemos más que muchas empresas de estas que evaden su obligación de pago. NO SE ENTIENDE COMO HAY GENTE QUE PRETENDE JUSTIFICAR LO INJUSTIFICABLE?
Jaime Lopez Vargas
Me encanta tu posicion Carolina : «somos trabajadores que nos capturan el pago del impuesto en la fuente » Es decir ni alternativa tenes.Practicamente confiscatorio.Ese es el estado que cada dia quiere mas y mas.
Rafael Arce
El estado requiere fondos para invertir en desarrollo y en atención social para bien de todos. Note que digo El Estado, no el gobierno. Sin dinero no se puede hacer absolutamente nada. Indirectamente está justificando a los desfalcadores. Esa es la posición típica del tico falto de criterio del cual se aprovechan los empresarios.
Jaime Lopez Vargas
Rafael : estamos de acuerdo que el «estado requiere fondos para invertir en desarrollo y en atencion social «.Ahora en serio; cuanto de nuestros impuestos esta dirigido a esos temas tan importantes e ineludibles ?
Y que porcentaje le damos a pagar el mantenimiento de la burocracia privilegiada ? Haga los numeros y vera el porque de «esa posicion tipica del tico «.
Rolando Romero
¿Y eso en qué afectaría la validez de los comentarios de los foristas?
Juan Huezo Zúñiga
¿Pero toquen ustedes esas dos ballenas mediáticas y los acusarán de atentar contra su «libertad de expresión», llegando al extremo de perseguir, hasta subliminalmente familias enteras, por puro desquite? Toda una mafia o cartel político empresarial cobijada a la sombra del corrupto poder, que la gran ciudadanía está contentica en ser engañada, con el medroso respaldo de todo el sistema, incluido los poderes de la República. Ellos, quitan y ponen a quienes les convengan. Qué arremedo de democracia.
Fernando
Y esos medios son los que predican la ética y moralidad que debemos tener todos los ticos, así o más cínicos son.