Washington, 11 jun (Sputnik).- El 9 de junio, Corea del Norte llevó a cabo su décima prueba con misiles en este 2017. Pero… ¿qué está detrás de la obsesión del país asiático con estos proyectiles?
Sin embargo, convertirse en una potencia nuclear no es una tarea fácil. En marzo, la ONU informó que las sanciones internacionales estaban empeorando los problemas de Corea de Norte debido a la interrupción de los flujos de auxilio al país asiático.
Pese a que muchas naciones se rehúsan a hacer negocios con Corea del Norte, el país ha logrado exportar materias primas como el mineral de hierro, níquel y minerales de tierras raras a su vecino, China, señaló la columnista.Además de un deseo personal de poder, existen algunas otras razones por las que el líder norcoreano desea convertir a Corea del Norte en una seria amenaza nuclear, consideró Cristina Varriale, analista de políticas nucleares, citada por el medio.
«En primer lugar, es una manera de reforzar su capacidad y lograr una disuasión estratégica contra Estados Unidos. Ser capaz de construir un ICBM, por ejemplo, va a cambiar el equilibrio estratégico, no solo a nivel regional, sino en relación a EEUU», detalló la experta.
Según Varriale, las pruebas de los misiles de corto alcance sería una forma de Pyongyang de prevenir un posible enfrentamiento con Seúl.
«Al tener el dominio de misiles de corto alcance, Corea del Norte no corre el riesgo de tener que enviar tropas a la frontera», concluyó la analista. (Sputnik)