Seúl, 15 jun (EFE).- Corea del Sur instó hoy al Norte a buscar la paz y la reconciliación en el día que se conmemora el 17 aniversario de la histórica cumbre entre sus líderes, en un momento de marcada tensión en la península por los ensayos armamentísticos norcoreanos.
Tal día como hoy del año 2000 los entonces líderes del Sur y del Norte, Kim Dae-jong y Kim Jong-il, se reunieron por primera vez, en Pyongyang, en un encuentro que dio como resultado la firma de la Declaración Conjunta del Norte y del Sur, que plasmaba la intención de las partes de buscar la reunificación.
El espíritu de reconciliación recogido en la declaración adquiere una relevancia significativa ante el deterioro de las relaciones intercoreanas, dijo hoy el Ministerio de Reunificación de Seúl.
«Al respetar e implementar la declaración conjunta, las dos Coreas deben adoptar un espíritu de búsqueda de la paz en la península coreana y de la reconciliación intercoreana», expuso el ministerio en un comunicado recogido por la agencia surcoreana Yonhap.
Varios grupos civiles de Corea del Sur habían solicitado viajar a la capital norcoreana para participar hoy en las celebraciones de la efeméride, pero la falta de respuesta por parte del Norte una semana antes de la cita, llevó a las agrupaciones a decidir celebrar eventos por separado.
El aniversario de este año se produce en un momento de marcada tensión ante los persistentes ensayos de armas de Pyongyang, que han llevado a una intensificación de las sanciones sobre el país asiático y a un aumento de la retórica de Washington, que ha llegado a insinuar la posibilidad de realizar ataques preventivos.
En un comunicado publicado con motivo de la efeméride y recogido por la agencia de noticias norcoreana KCNA, el Comité para la Reunificación Pacífica del País (CPRC) pidió a Seúl abrir «una nueva era del desarrollo de las relaciones norte-sur y la reunificación» sin intervención de «forasteros».
«La reunificación nacional no requiere de la aprobación de nadie y no puede ser lograda con la ayuda de otros», clama el texto, que hace un llamamiento al Gobierno del nuevo presidente surcoreano, Moon Jae-in, a abandonar la «política de confrontación hostil hacia los compatriotas» para lograr la unidad. EFE