Ginebra, 5 dic (EFE).- Las negociaciones de paz para Siria auspiciadas por la ONU se reanudaron hoy en Ginebra con la participación de la oposición pero con la ausencia de la delegación gubernamental, que ni tan siquiera ha anunciado si volverá a unirse al proceso.
El enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura, pretendía que la octava ronda de negociaciones que empezó el 28 de noviembre duraran hasta el 15 de diciembre y que las partes se tomarían el fin de semana para «refrescarse» y para «consultas».
Sin embargo, el viernes, antes de partir de Ginebra, el jefe negociador de la delegación gubernamental, Bashar Yafari, advirtió que tal vez no volverían a unirse al proceso negociador por culpa de la supuesta precondición de la oposición de que el presidente sirio, Bachar al Asad, no participe en un eventual proceso de transición.
Según publicó el diario progubernamental Al Waten, la decisión sobre un posible retorno aún no se había tomado.
Por su parte, el jefe de la delegación opositora, Naser Hariri, reclamó a De Mistura y a la comunidad internacional qué digan públicamente quién está boicoteando el proceso.
«Es la responsabilidad del enviado especial y de la comunidad internacional anunciar al mundo qué parte está rechazando la negociación», afirmó hoy Hariri en declaraciones a la prensa tras reunirse con el mediador.
«La parte que dice que somos nosotros los que ponemos precondiciones al diálogo es la que están efectivamente poniéndolas», agregó.
El mediador instó a las partes antes de comenzar esta ronda a no poner precondiciones ante la mesa, algo de lo que las partes se han acusado mutuamente de incumplir.
La directora de comunicación de la ONU en Ginebra, Alessandra Velucci, declinó por su parte comentar sobre el hecho de que la delegación gubernamental no estuviera en Ginebra ni que dudase sobre su participación.
«El mediador está listo para entablar negociaciones con todas las partes», se limitó a decir Velucci.
Por otra parte, Hariri afirmó que la oposición -unificada por primera vez en esta ronda- es la que está «buscando la paz, mientras que la otra parte sigue masacrando al pueblo sirio».
«Mientras nosotros estamos aquí negociando, el régimen lleva a cabo atrocidades y masacres. En Guta Oriental tenemos mujeres y niños heridos que necesitan ser evacuados. El régimen no está permitiendo que esto suceda», denunció Hariri.
«La pesadilla en Guta Oriental muestra porque necesitamos una solución política para poder asistir al pueblo sirio», concluyó.
Guta Oriental es un bastión rebelde en las afueras de Damasco que está sitiado por el régimen y donde viven 400.000 personas, 500 de las cuales necesitan evacuación médica urgente, según la ONU.
En las últimas semanas, los combates se han recrudecido lo que ha causado decenas de víctimas, la mayoría de ellas civiles. EFE
1 Comment
Pragma-Tico
«la supuesta precondición de la oposición de que el presidente sirio, Bachar al Asad, no participe en un eventual proceso de transición».
Esto hiede a lógica gringa. Se supone que hay mucho que negociar y que el Gobierno sirio no se está rindiendo. De hecho, el gobierno ha logrado muy importantes victorias en el conflicto de Siria. Pero el Gobierno gringo no es muy lúcido que digamos y comete una de sus muy acostumbradas estupideces, que a la larga es intencional para detener el proceso y seguir tratando de lucrar con el conflicto y la sangre ajena.
De qué sirven estas reuniones para la transición sin la participación del Gobierno sirio?