Entre enero y septiembre, el comercio chino-estadounidense se situó en 471.800 millones de dólares, un 12,1 por ciento más que en los primeros nueve meses de 2017.
Las exportaciones chinas a EEUU crecieron un 13 por ciento, hasta 348.800 millones de dólares, y las importaciones, un 9,4 por ciento, hasta 123.000 millones.
En septiembre, el intercambio comercial entre las dos mayores economías del mundo fue de 59.260 millones de dólares.
China exportó a EEUU productos por 46.690 millones de dólares, mientras que las importaciones se situaron en apenas 12.560 millones.
Como resultado, el de por sí abultado superávit en el comercio chino con EEUU se incrementó todavía más, marcando el récord de 34.130 millones de dólares.
EEUU y China, primera y segunda economías del mundo respectivamente, se han enzarzado en una guerra comercial a gran escala en los últimos meses.
En julio pasado, establecieron un arancel recíproco del 25 por ciento a productos por valor de 50.000 millones de dólares.
Desde el 24 de septiembre, EEUU aplica una tarifa del 10 por ciento a las importaciones mutuas por 200.000 millones de dólares que, según las previsiones, se elevará al 25 por ciento a partir de 2019.
China respondió a ello con aranceles de entre el 5 y el 10 por ciento a productos estadounidenses por 60.000 millones de dólares.
El presidente de EEUU, Donald Trump, amenazó en julio pasado con gravar mercancías chinas por 500.000 millones de dólares, prácticamente la totalidad de lo que EEUU importa de China. (Sputnik)
1 Comment
Juan Huezo Zúñiga
El famoso consumismo gringo les está produciendo una mala jugada con esas cifras ante los chinos. Ese estudiado plan rojo de que los productos baratos de use y bote a un cortísimo plazo, fuerza al mercado a tal desequilibrio, donde hasta la moda les traiciona. Un ejemplo práctico: los vehículos, hechos en el pasado para que fuesen durables (10-20 años) hoy los rojos hacen, con mano de obra baratísima por cientos de miles de millones, dándolos un promedio de 2 o 3 años sin fallar. ¿Quién podrá frenar esa estrategia roja, donde el mundo consumista teje la cuerda para ahorcarse? Pues los mismos productores internos, quienes hasta han traslado su producción, precisamente para la “ganga” de la mano obra, pero les saló el tiro por la culata, por cuanto ya estamos (incluyo CR) en esa espiral difícil de abandonar, pero organizadamente podrían desmantelar esa calculada y adversa táctica. Calidad en el tiempo, como los vehículos reales “Made USA” darán auténtica solución, no solo a los EEUU, sino al resto de la comunidad mundial. Otra muestra: Tal vez ustedes han visto reportajes de Cuba, donde miles de chatarras gringas andan por esos caminos de Dios funcionando adecuadamente. ¿Ustedes tienen la respuesta?