Managua, 20 dic (EFE).- La decisión del Gobierno de Nicaragua de dar por concluida la misión de dos entes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) busca evitar tener «testigos directos» de los «crímenes» cometidos por el Ejecutivo en el marco de la crisis que vive el país y que ha dejado centenares de muertos, denunció hoy un grupo opositor.
«Esta expulsión confirma el rumbo de represión y violaciones a los derechos humanos en que se han embarcado los dictadores y el deseo de no tener testigos directos de sus crímenes», señaló el denominado Frente Amplio Democrático (FAD), integrado por dirigentes de la antigua principal fuerza opositora de Nicaragua, en una declaración.
«La decisión de la dictadura tiene también el propósito de descalificar las denuncias debidamente respaldadas que estos organismos han registrado y han dado a conocer al mundo, creyendo que con ello van a callarlos y debilitar la fuerza de sus denuncias», continuó.
El canciller nicaragüense, Denis Moncada, comunicó el miércoles al Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (Meseni) la suspensión temporal de su misión y dio por expirado el plazo al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), que investigaba las violaciones a los derechos humanos entre el 18 de abril y el 30 de mayo.
El GIEI tenía previsto presentar este jueves en Managua un informe de 460 páginas sobre los descubrimientos arrojados por su investigación.
«Reafirmamos ante el pueblo nicaragüense y ante la comunidad internacional que la salida pacífica de la dictadura es la única forma de restablecer el imperio de la ley y conseguir que se haga justicia para las miles de personas que han sufrido por los asesinatos, por los secuestros y encarcelamientos arbitrarios, y por el exilio a que se han visto forzados», anotó el FAD.
Ese grupo agradeció a los dos entes de la CIDH «por su labor abnegada y constante en cumplimiento del mandato recibido a pesar del sabotaje sistemático del Gobierno, que no pudo impedir que, junto con la CIDH, expusieran la verdad de lo que está sucediendo en Nicaragua».
Nicaragua está inmersa en una crisis desde el estallido el 18 de abril de unas protestas que buscan la renuncia del presidente del país, Daniel Ortega.
La situación ha dejado 325 muertos desde abril, de acuerdo a la CIDH, aunque algunos grupos elevan la cifra a 545 las víctimas mortales, mientras que el Ejecutivo solo reconoce 199 y denuncia un intento de golpe de Estado. EFE