Se denomina con el nombre “aapartheid “al sistema de segregación racial en Sudáfrica y Namibia y en consecuencia todos creemos que solamente ahí existió sistema tan abominable.
Nelson Mandela se pasó veintisiete años tras las rejas acusado por la CIA y el gobierno de blancos como terrorista. Su lucha sacrificada al final rindió sus frutos y logró desplazar el gobierno de blancos y constituir uno dominado por la mayoría negra. Sin embargo soslayaron buscar soluciones a la problemática social y hoy en día Sudáfrica es uno de los países más desiguales del mundo. Es bueno recordar que Estados Unidos protegió hasta los últimos momentos este sistema de segregación racial y en su momento ofreció a los gobernantes blancos armas atómicas para acabar de una vez por todas con la resistencia de los negros.
En Costa Rica uno de los insignes luchadores contra el apartheid fue don Fernando Volio, abogado y diputado, quien pese a ser de derecha y consciente de que los abanderados a nivel mundial contra este sistema de segregación racial eran los comunistas, sin embargo estuvo pie a pie en la lucha hasta la victoria final.
En América Latina, guardando las distancias, hemos tenido en Bolivia una situación de lucha de clases con características raciales y bastante parecidas también en Guatemala, donde la población indígena es mayoritaria pero dominada por minorías blancas que conservan rasgos feudales.
África y América fueron colonizadas por los europeos y de ahí se derivan características que las asemejan, en África negros y blancos, en América “indios” y blancos.
No ha sido sino hasta hace pocos años que un Bolivia, liderado por un indígena cocalero, Evo Morales, se dio vuelta a la tortilla, pero no para destruir a los blancos, sino para establecer un estado plurinacional donde tuviesen cabida todas las etnias y razas y que además logró llevar al país a los más altos índices de desarrollo.
Con el golpe de Estado contra el presidente legítimo Evo Morales, estamos retornando a un pasado que creíamos desterrado, las asonadas militares financiadas y apadrinadas por los Estados Unidos, pues en los últimos tiempo se habían inclinado por los golpes de Estado patrocinados por jueces, medios de comunicación y parlamentos.
Han establecido un gobierno autoproclamado, sin ninguna legitimidad pero que, protegido por los militares y la OEA, están logrando su objetivo : deshacerse de Evo Morales Aima, el cual tuvo que exilarse en México para salvarse de una muerte segura. Instituciones legítimas como el congreso y el Senado, donde el MAS tiene una amplia mayoría obtenida en legítima lid, están actuando con inusitada timidez y debilidad, renunciando a todos los derechos que les asiste y permitiendo que los racistas se consoliden. Como dijo la diputada Chilena Camila Vallejo: “los pueblos en América Latina no han aprendido nada sobre golpes de Estado”.
Regresa a América Latina no solo la oscura noche de los golpes de Estado militares, sino, lo que es más grave regímenes racistas con color de apartheid.
(*) Juan Félix Montero es Educador
Alfredo Jalife …Bolivia ha sido el país con mayor crecimiento económico de toda Sur América https://www.youtube.com/watch?v=6Lw3FcHdhH4
Derrocar a Evo es un primer paso al retorno a los días oscuros de América Latina. Y nunca debemos olvidar que fue un costarricense llamado Manuel González Sanz, líder de los observadores de la OEA quien encendió ese fuego perverso haciendo creer que había fraude donde nunca sucedió algo así
Me parece un muy buen análisis el que aporta Juan Félix, para esclarecer, lo qué pasa en Bolivia
Que lindo escribir pelodudeces desde otro lugar e ignorar todas las aristas de un problema que lleva dos décadas en Bolivia, por un lado el «indio» bueno y oprimido, contra el «blanco» (inclúyase el mestizo), que es el «opresor», ese es el discurso divisivo del Morales y su pandilla ligada al narcotráfico, se ciegan solo por un discurso político de izquierda que murió con la caída de la URSS.