viernes 29, marzo 2024
spot_img

Grandes problemas, grandes soluciones. Parte I

A los países como a las empresas y a los ciudadanos, se les presentan épocas difíciles cada tiempo, estas dependen de factores intrínsecos y factores extrínsecos, las más de las veces de una mezcla de ambas.

Si bien el gobierno actual en manos de un joven que por cierto ha tomado decisiones que los cinco veteranos anteriores no quisieron tomar, actuando negligentemente, él con su juventud ha ido poco a poco desenrollando en hilo de Ariadna. Esto no ha sido suficiente porque estamos demasiado hundidos con nuestra economía y además los estornudos de Trump en su campaña, nos están pringando.

He leído mucho sobre la gran recesión de EEUU que contagió al mundo entero, el año 1928 fue indiscutiblemente un año que trajo un cambio radical al mundo y fue lo que yo llamaría el intermezzo de la gran Guerra que comenzó en 1914 y terminó en 1945, ese intermedio de la gran redención fue la guerra económica que impulsaría la segunda parte de la gran guerra (Segundo round).

Hoy estamos en una pequeña recesión que debemos como Estado Soberano, enfrentarlo sin titubeos ni mezquindades. Podríamos pensar que es imposible, pero si es posible, la mejor manera de generar riqueza es generando trabajo y para generar inversión solo se puede mediante la creación y desarrollo de obra pública. Desde luego que muy pocos de los desocupados en la actualidad irán a “volar pico y pala”, pero es que la inversión masiva en obra pública hace de manera concatenada, una especie de efecto cascada.  ¿Por qué razón no invertir mediante préstamos en desarrollo de carreteras nacionales que bastante se necesita? ¿Por qué razón no crear zonas industriales en los cantones pobres y alejados como Corredores, entre otros, invitando países desarrollados a construir autos y maquinaria para exportar a todo Latinoamérica? No hay duda que el mejor activo que tenemos en Costa Rica es el costarricense, de eso no hay duda, el costarricense tiene un alto grado de educación y además es trabajador. Invitemos a Corea y a la China, a Alemania y a Japón, mediante atractivos con facilidades de inversión.

Costa Rica está urgido de una red ferroviaria de grandes proporciones: Limón Caldera y Cartago Alajuela, que nos lleve a disminuir las emisiones de CO2, una gran Zona Franca en Limón para los importadores mesoamericanos, no hablo de la cuchufleta que crearon durante el gobierno de Monge en Golfito, hablo de una zona franca como la finada de Colón, eso disminuiría los gastos de los importadores y exportadores disminuyendo en mil kilómetros el transporte para los países de Costa Rica hasta Guatemala.

Estás solo son algunas de las medidas urgentes, pero hay muchas más. ¿Por qué el INS no se dedica a vender pólizas y traspasa el hospital de Trauma a la CCSS, junto con el pago de servicios médicos a ella mediante las pólizas que cobra? La CCSS se vería beneficiada y el INS se liberaría de un asunto que no comprende.

(*) Dr. Rogelio Arce Barrantes es Médico

Noticias de Interés

2 COMENTARIOS

  1. Se infiere de este artículo que el autor lo que propone son medidas Keynesianas, las mismas que aplicó Roosevelt para arreglar el entuerto de 1929, eso mismo es lo que proponen con muy buen tino, un reducido grupo de economistas criollos entre ellos don Luis Paulino Vargas. Por cierto nuestro joven presidente, no va a tomar esas decisiones, o mejor dicho nuestra oligarquía NO lo va a dejar hacer nada de esto. La suerte de nuestro País está prácticamente decidida, ni siquiera las señales que nos vienen del sudamérica o las otros lares, hará cambiar a nuestros tercos y egoístas aristócratas. El choque de trenes es casi que inminente.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Últimas Noticias