jueves 18, abril 2024
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No más circo mediático: ¡Sean serios, por favor»

Columna Poliédrica

Voy a escribir este artículo en primera persona porque me siento obstinado de tanta estupidez. Pensaba que la profesión de comunicador era de las que mejor podían servir a la sociedad, sin embargo, se ha vuelto un trabajo en que dejó de importar el bienestar colectivo para caer en procesos en que no importa para nada los principios más básicos que rigen esa actividad profesional.

Cualquier persona con un poquito de cerebro sabe que el coronavirus siempre ha existido. Que su letalidad ni siquiera se le acerca a otras enfermedades, menos a las que se dan por muertes violentas y, mucho menos, a las que ocurren por el hambre de personas que no tienen como alimentarse. No obstante, los comunicadores prefieren exaltar y provocar una histeria colectiva por el tal coronavirus, antes de informar correctamente, de manera balanceada y veraz sobre este tema.

Una situación similar está ocurriendo con lo acontecido en nuestro medio con la Unidad Presidencial de Análisis de Datos (UPAD). El circo que se ha montado alrededor de este tema resulta innecesario, sin que con esto esté diciendo que el tema no es relevante. Las personas con algún nivel de educación deberían saber que los datos personales, sensibles o confidenciales, son obtenidos de diversas formas por entes privados y públicos, ese no es el tema.

Los comunicadores de este país deberían ser más profesionales. Que informen los hechos que se han dado, las personas que los han realizado y que exijan las responsabilidades correspondientes, pero que no traten de construir una noticia sobre relatos inventados, con base en juicios de valor y dejando de lado los principios básicos de toda comunicación: balance y veracidad.

No estoy defendiendo al Presidente y menos a sus subalternos. Por supuesto que deben afrontar sus responsabilidades ante semejante metida de pata, la torpeza política que hay detrás de esto es supina. Que cada palo aguante su vela, empezando por el que ejerce la presidencia de la República, sin embargo, uno esperaría que la Defensoría de los Habitantes y la propia Fiscalía General, no se presten para el escarnio público que se ha querido montar alrededor de esta circunstancia.

Tal y como otras personas lo han manifestado, existen otros temas de más relevancia que merecen la atención de toda la ciudadanía. Hay gente que todavía no ha entendido que el problema de desempleo, por ejemplo, responde a una deficiencia estructural. Las personas de más de cuarenta años que durante los años ochenta del siglo pasado desertaron de la secundaria están siendo, literalmente, expulsados de los procesos productivos actuales y son los que están engrosando la indigencia o algunos trabajos informales; en contraste, las personas que tienen menos de treinta años y que dejaron sus estudios, también no tienen cabida en el proceso productivo y son las personas que están siendo reclutadas por el narcotráfico.

De este y otros temas relevantes, los comunicadores no se preocupan y si lo hacen, presentan un sesgo que no les permite informar adecuadamente y exponer de manera clara la situación. El problema es que estar harto de esta situación no resuelve absolutamente nada, ya que hay personas que siguen creyendo en estos comunicadores irresponsables. De mi parte he dejado de ver y escuchar los noticiarios nacionales, tanto los televisivos como los radiales; asimismo, las suscripciones a diarios nacionales las cerré.

Me informó optando por medios de comunicación como el El País.cr y desarrollando una observación crítica de los contenidos informativos. En el mundo digital, desgraciadamente, abundan los irresponsables y no se puede creer en todo lo que se publica como muchos ingenuos lo hacen. Contrastar informaciones es un buen método para no dejarse llevar por las noticias falsas y por comunicadores que denigran su profesión.

Basta ya de tanta estupidez. A los comunicadores les pido que se pongan la mano en el cerebro y que comprendan el mal que le están haciendo a nuestra sociedad.

(*) Andi Mirom es Filósofo

andimirom@gmail.com

columnapoliedrica.blogspot.com

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7 COMENTARIOS

  1. No saben o desconocen de la DIS tiene toda la razon whatsapp , facebook y todas estas mierdas te leen todo y tus fotos y videos están a su orden, google + no obtuvo millones de informacion y se la dieron a otra gente. SOLO HAGAN LA SIGUIENTE PRUEBA PONGAN EN FACEBOOK O CUALQUIER RED QUE OCUPAN COMIDA PARA PERROS Y GATOS Y VERAN QUE EN HORAS LES LLEGARAN ANUNCIOS

  2. Totalmente de acuerdo don Andi, no siempre comparto sus opiniones, pero en esto tiene usted toda la razón, pero lamentablemente los medios ofrecen lo que la población pide, prefieren la novela política que la información veraz, y los políticos se apuntan a esto, buscan la popularidad y no el hacer las cosas como debe de ser, a Emilia Navas yo le tenía mucha fe, parecía una persona seria y responsable, ahora veo que solo es otro títere mediático, y la defensora de los habitantes ni que decir.

  3. Estos medios que tienen un interes muy especiales en manipular la opinion publica , mentras mueven los hilos que les permiten mantener su zona de confort segura y protegida. Poner en los puestos politicos a los personas que les sigan abonando el terreno a sus amigos , a los que utilizan el gobierno para hacer sus suculentos negocios y proteger los grandes evasores, por ejemplo. Este escandalo que han armado tambien les podra servir como un elemento distactor para enterrar el proyecto de abrir o eliminar el secreto bancario. Poco importa cuanto se pueda perjudicar a la sociedad , con su manera amarillista , politicamente parcializada y politiquera de manejar la infofmacion . Sus intreses son prioritarios. Lo peor es que una cantidad muy grande de personas les creen el cuento de que estan informando para defender y cuidar interses de las mayorias .No sers , a estos sus intereses , el pais , les importan un soberano comino . Sin duda que estos medios estan ya bien apuntados a la campaña politico – electoral del 2022. Y apuntados con la nefasta politequeria en su maxima expresion. De veras que ya dan nauseas su gran irresponsabidad ,su falta de seriedad y total falta de profesionslusmo .

  4. Estimado Andi: los periodistas, por lo general son empleados abozalados por sus patronos, los cuales, como medios privados les dictan sus pautas y prioridades político-económicas. Si ellos, pretendiesen ser independientes en sus publicaciones, tenga la certeza que los sacan de sus filas, hacia el desempleo. Esas libertades, en un país como el nuestro, con una discutible democracia, es un pecado mortal al sistema. Por ello persiste una galopante y absoluta corrupción, en todos sentidos, donde hasta los aires extranjeros influyen en tales abnegados profesionales. He aquí la principal razón del porque no quise estudiar periodismo. El estar supeditado tan ferozmente a esos directores mediáticos, jamás lo soportaría, y moriría de hambre siéndolo, irremediablemente.

  5. Siendo yo alguien que trabaja en informática y que sabe la utilidad del uso de datos, me di a la tarea de conocer el trasfondo detras del UPAD.
    Tristemente lo que me encontrado en medios es una gran desinformación y desconocimiento en torno a lo que son datos de acceso público, datos de acceso restringido y datos confidenciales, y mucha gente no sabe diferenciar entre los 3, en particular mucha gente en cargos políticos.
    La prensa, en especial la amarillista, esta sedienta a más no poder de encontrar el próximo «cementazo» y creen que con esto del UPAD han encontrado petróleo. A tal punto llega la histeria que están fabricando polémica donde no la hay, alimentado por un desconocimiento que me deja sin palabras.
    Desgraciadamente el publico consumidor de estas noticias, esta generando una opinion en base a cosas incoherentes y erroneas, que no hacen más que crear un mostruo que no existe.
    Hay evidentemente un problema gordo en la redacción del decreto de ley y ahi esta el único fallo que veo. Allí no hay duda alguna que el Ministro de la Presidencia y su asesor legal hicieron mal su trabajo.
    El resto de cosas hechas parece estar apegado a la ley y los resultados han sido muy buenos. Cualquiera persona con acceso a internet puede ver esos resultados ya mismo.
    En fin, dejemos que el Ministerio Público tenga la última palabra.
    Existe un dicho que dice «lo que no se mide, no se conoce y no se puede mejorar», y en ese sentido espero que lo acontecido no detenga esa iniciativa, pues ya era hora que alguien usara datos para arreglar los problemas que tenemos en el pais.

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