De cal y de arena
Se reunió la Junta Fundadora de la Segunda República el día 18 de junio de 1948 –hoy hace exactamente 72 años- para una sesión ordinaria de trabajo. Pocos sabían los temas de la agenda, sin duda su presidente José Figueres Ferrer y su ministro de Hacienda Alberto Martén sí. Tal vez solo ellos podían percibir que por sus contenidos, aquella sesión sería la “sesión-terremoto”.
Miguel Acuña Valerio, quien bastantes investigaciones acumula sobre los hechos del ’48, denomina esa sesión como la “sesión terremoto”, vistos los temas y los acuerdos:
- Se impone una contribución extraordinaria del 10% sobre el capital.
- Se decreta el monopolio del Estado en la recepción de los depósitos bancarios del público (conocido como nacionalización bancaria).
- Se aumenta el salario básico de los trabajadores.
- Se impone un régimen garantizado de precios mínimos para el agricultor y máximos para el consumidor.
- Se declara que la producción y la distribución de los artículos de consumo popular es una función pública.
- Se ordena la suspensión de las garantías individuales por 30 días.
La sesión se levanta a las 12 de la noche y se pide a Figueres que explique a la Nación la gravedad del momento y el por qué de esas medidas radicales.
De veras que por sus contenidos, esos acuerdos tuvieron el impacto de una “bomba de profundidad” lanzada en una “sesión-terremoto”. Por lo demás, muy al margen de la naturaleza de un equipo de gobierno matriculado con las tareas de restituir la pureza del sufragio, la nitidez en la función pública y…. la persecución de los delincuentes del régimen caído para lo cual se habían creado los Tribunales de Sanciones Inmediatas.De
Las más gruesas de esas resoluciones revolucionarias ya pasaron a la historia. El impuesto del 10% al capital fue derogado por la administración Ulate y la derogatoria del monopolio estatal de los depósitos bancarios se materializó en la administración Figueres Olsen. Al margen la suspensión de garantías, ¿qué quedó de lo demás?. Todo; al fin y al cabo, ejecución de conceptos y enfoques insertos en la concepción de las Garantías Sociales que había promulgado Calderón Guardia.
La esencia de las decisiones habidas en la “sesión-terremoto” se incorpora al legajo histórico que quedó integrado en la visión institucional del Estado que consagra la Constitución Política de 1949. Lo que para Daniel Oduber conforma el modelo liberacionista de desarrollo económico y social, con vigencia entre 1948 y 1978 “cuando Costa Rica funcionó como tenía que funcionar…. porque el modelo era exitoso”.
¿Pudo haber sido mejor la Costa Rica que emergió de ese modelo?, se pregunta Oduber. Y responde: “El mundo está lleno de hipótesis en ese sentido, pero la verdad es que el modelo funcionó y tanto, que llegó un momento en que un grupo de fuerzas políticas decidió oponerse a él y por querer destruirlo, destruyeron a Costa Rica. Tarea difícil será reconstruir el modelo y reconstruir a Costa Rica”. (RAÍCES DEL PARTIDO LIBERACIÓN NACIONAL, Notas para una Evaluación Histórica”, 1997.
(*) Álvaro Madrigal es Abogado y Periodista
Dos(2) bancos estatales estan con problemas, cuales son? Y porque medidas correctivas no se han tomado para corregir.
Por una Costa Rica mas transparente para nuestras generaciones y las que vendran.
Recuerde, no grite porque gritar quizas sea una medida no recomendada para la prevencion del Covid-19.
Almuerze bien! Panza llena corazon contento.
Bendiciones!