El legado del Presidente Donald Trump quedará para los anales de los libros y la historia de los Estados Unidos y del Mundo y es que fue un 06 de Enero del año 2021, un día designado en el calendario específicamente para la Certificación Electoral en el Capitolio de Washington a la 1 de la tarde se iniciaría el proceso por el Congreso Estadounidense, entiéndase Senadores y Cámara de Representantes de una forma simbólica y tradicional que se repite cada 04 años y en este caso se Certificaría la victoria demócrata del candidato Joseph Robinette Biden Junior como Presidente.
Pero siendo las 12.00 de ese día aproximadamente el Presidente saliente reunido en el monumento a Washington, junto a la Casa Blanca con partidarios, seguidores y fanáticos de los más diversos grupos radicales de derecha y anarquistas quienes convencidos de un fraude electoral sin pruebas al parecer tenían intenciones distintas, irritados, frustrados, cegados en sus ideas delirantes y patológicas de seguimiento a su líder y supremacía sin observar su Salud Mental ni los trastornos mentales que pudieran presentar iniciaron una marcha hacia el Capitolio y posteriormente la toma del mismo.
Este día caótico, inaudito, increíble, sombrío, violento, de agresividad extrema se asalto la cuna de la Democracia y las libertades civiles y se pretendió violentar el imperio de la ley con la razón de la fuerza y no con la fuerza de la razón; pretendiendo desconocer la voluntad popular; es cierto eso no fue una protesta, esa turba actúo de manera insurrecta, como acciones propias de un terrorismo domestico.
Son 05 las vidas perdidas muchos los arrestados , se ataco a los servicios secretos, de inteligencia a la seguridad del capitolio y quien sabe que hubiera podido pasar con la vida de los legisladores, la prensa fue atacada como un enemigo del pueblo, lenguaje que sólo se utiliza en regímenes totalitarios y por dictadores, los expertos en seguridad dicen hoy que fallo todo, la Alcaldesa apelo a el toque de queda , la guardia nacional llego de manera tardía.
Pero ¿Quién es el responsable o quienes son los responsables? Se sabe quien alentó y promovió el pedido de marchar al Capitolio; hoy por las redes sociales están las fotos de los actores y ejecutores para su reconocimiento facial, identificación y posterior sanción por el poder judicial que buscara la justicia y esta bajo el análisis todavía la enmienda 25 de la constitución de Estados Unidos o la destitución; la Constitución no es una reliquia es el marco legal de la Nación.
Nadie esta por encima de la ley a Estados Unidos lo hace grande el imperio de la ley no somos una monarquía, las autoridades no tienen un dueño, propietario o amo, las palabras tienen consecuencias, somos un gobierno de leyes, no de personas o individuos, sin mas tolerancia a la agresión y las mentiras todavía esto no ha terminado recién comienza.
Por los valores en que creemos justicia, imparcialidad, honor, ética, honestidad y volveremos a ser grandes otra vez.
A mi manera.
(*) Juan Carlos Valderrama es analista político
Que hubo una oculta mano del poder para dar luz verde a esas turbas es una contundente realidad. La idea, al mejor estilo mafioso, buscaba amedrentar a las altas autoridades políticas, como se hizo en varios Estados, pero se pasaron de la raya. Pero ya estamos al tanto de cómo se aplica la ley en los EEUU, cuando los blancos y los otros actúan asimétricamente. Pero esto no es todo. Las armas en manos de peligrosos «patriotas» pueden desencadenar situaciones beligerantes en todo el país, produciendo crímenes, asesinatos, balaceras, etc., con lo cual, pareciese un siniestro plan oculto para debilitar ese paradigmático país. Espero con lo dicho, Dios me haya hecho jetón y no profeta, pero esas sociedades están calientes, enardecidas, debido a la atizada hasta mediática las cuales deben inyectarles razonabilidad, juicio y verdadero amor a su Patria. Nunca es tarde cuando la paz prevalezca y reine.