Barcelona (España), 3 oct (dpa) – El gobierno de Cataluña mantiene la convocatoria del referéndum independentista del 9 de noviembre pese a la suspensión del Tribunal Constitucional español, según acordaron hoy el presidente de la región del noreste de España, Artur Mas, y los grupos políticos que apoyan la consulta.
El jefe del Ejecutivo catalán se reunió hoy en Barcelona con representantes de las fuerzas soberanistas de la región para consensuar una respuesta al alto tribunal, después de que éste suspendiera cautelarmente esta semana la convocatoria del referéndum y la ley de consultas aprobada para darle amparo.
El portavoz del gobierno regional, Francesc Homs, hizo una breve comparecencia pública en la que anunció la decisión conjunta de los grupos de seguir adelante en el proceso soberanista para que «la ciudadanía pueda participar y ejercer el derecho de voto».
También destacó que pedirán al Constitucional el levantamiento de la suspensión y que harán un «análisis exhaustivo» para garantizar las mejores condiciones democráticas para celebrar la consulta.
El gobierno de Mariano Rajoy anunció hoy que recurrirá ante el alto tribunal los pasos dados por Mas en las últimas horas, como la aprobación el jueves de la junta electoral dirigida a supervisar el referéndum, lo que considera ilegal.
«Nadie puede diseñar la democracia a su medida, porque está diseñada a la medida de los derechos de los españoles», dijo en rueda de prensa la «número dos» del gobierno español, Soraya Sáenz de Santamaría.
Partidos como el independentista republicano ERC o la pequeña CUP presionan a Mas para que retome la campaña institucional dirigida a promover la consulta del 9 de noviembre, después de que el gobierno catalán decidiera suspenderla temporalmente a raíz del veto del Constitucional.
El gobierno de Rajoy siempre se ha mantenido contrario a la consulta y Mas ha repetido en varias ocasiones que solo se celebrará si se hace de forma legal.
El independentismo ganó fuerza en los últimos años en Cataluña, una región con 7,5 millones de habitantes. Según un sondeo difundido hoy por su gobierno, el 70,8 por ciento de los catalanes apoya la consulta soberanista, frente a un 22,9 por ciento que está en contra.
El martes, miles de personas salieron a la calle para pedir la celebración de la votación. La pasada noche, un grupo de independentistas pasó la noche en una céntrica plaza de Barcelona ante un fuerte dispositivo policial. Los agentes les requisaron las tiendas de campaña con las que pretendían acampar en señal de protesta.