Estambul, 5 oct (dpa) – El pueblo kurdo ocupa un territorio casi continuo que abarca partes de Turquía, Siria, Irak e Irán. Cuando el Imperio Otomano colapsó, esta población mayormente rural se encontró dividida por las nuevas fronteras.
No está claro el número exacto de kurdos en la región, pero se habla de 20 a 30 millones.
Los kurdos tienen su propia cultura y hablan muchas lenguas estrechamente relacionadas. La mayoría de ellos son musulmanes sunitas, pero también hay alauitas, chiitas y yazidíes.
Si bien nunca tuvieron un estado independiente, muchos kurdos ansían contar con uno. Otros sólo demandan una mayor autonomía. Pero los dos coinciden en sentirse institucionalmente discriminados. En algunos casos, grupos kurdos se han centrado en ganar derechos civiles dentro de los países en los que viven.
TURQUÍA: Al menos ocho millones de kurdos viven en Turquía, principalmente en el sudeste, aunque algunas estimaciones indican que el número es mayor. Hubo varias revueltas y persecuciones por parte del Estado desde los años 20, lo que produjo la muerte de decenas de miles de personas y desplazamientos.
En los años 70, fue creado el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK). La insurgencia armada comenzó en 1984, durante un periodo de gobierno militar, aunque muchos kurdos permanecieron fieles al Estado.
Desde hace 18 meses se mantiene un alto el fuego en el marco de negociaciones del gobierno con el grupo. En los últimos años se relajaron las restricciones al uso del lenguaje kurdo pero aún hay tensión entre los kurdos y el gobierno.
IRAK: Los kurdos de Irak ganaron autonomía gracias a la zona de exclusión aérea impuesta por Naciones Unidas tras la Guerra del Golfo de 1991. La región rica en petróleo en la que viven cuenta con mayores estándares de vida y seguridad en comparación con el resto del país. El gobierno de Kurdistán discute con Bagdad por el control de los recursos petroleros y territorios étnicamente mixtos disputados.
También hay una rivalidad de larga data entre sus dos principales partidos, el Partido Democrático de Kurdistán (KDP) del presidente regional Massud Barzani y la Unión Patriótica del Kurdistán (PUK) del ex presidente iraquí Jalal Talabani.
El KDP cuenta con estrechos vínculos con Turquía, mientras que el PUK es más cercano a Teherán y también cuenta con buenas relaciones con el PKK. Se estima que hay cinco millones de kurdos en el norte de Irak, mientras que muchos más viven en otras partes del país.
SIRIA: Se estima que hay unos dos millones de kurdos en Siria. La mayoría vive en el noreste o como migrantes en Alepo y Damasco. El Partido de la Unión Democrática, vinculado al PKK turco, ha tomado ventaja de la guerra civil para crear tres regiones autónomas en áreas que controla en el norte de Siria.
Las milicia YPG de estas regiones ha luchado con determinación contra el Estado Islámico (EI), del que ha sido hasta ahora uno de sus más duros oponentes.
Sin embargo, muchos kurdos sirios apoyan al Consejo Nacional Kurdo (KNC), que no reconoce estas regiones autónomas y coopera con la oposición siria apoyada por Occidente. El KNC es cercano al líder kurdo iraquí Barzani.
IRÁN: Los kurdos de Irán podrían llegar a ser ocho millones, de acuerdo con la CIA. El Kurdistán iraní es políticamente tranquilo, aunque operan en él algunos pequeños grupos guerrilleros.