San José, 28 Oct (ElPaís.cr) – Altos funcionarios del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT), viajaron a China para renegociar el contrato firmado con la empresa China Harbour Engineering Company (CHEC), la cual se encargará de la ampliación de la Ruta 32.
Entre las principales pautas de la nueva negociación, están la reducción de riesgos por eventuales aumentos en los costos y atrasos, además de otros posibles escenarios si no se cumpliera lo estipulado en el contrato.
El Ministro MOPT, Carlos Segnini y el Viceministro de Infraestructura y Concesiones, Mauricio González, planean desarrollar una serie de reuniones este miércoles, jueves y viernes de esta semana, en la cual se busca especificar presuntos «vacíos legales».
Según información institucional, «el objetivo es alcanzar un acuerdo que permita modificar todas aquellas condiciones del contrato firmado que el actual gobierno considera riesgosas para el país».
«Estamos convencidos de que los términos en los que está establecido el contrato actual, particularmente los plazos para la ejecución de las labores de diseño y las que tiene que cumplir el Estado nos van a llevar en una ruta de conflicto con el contratista, al no poder ejecutar a tiempo lo estipulado», explicó González.
El Viceministro enfatizó en que esto puede colocar al país en una posición de «peligro inminente».
Resaltaron que se debe aprovechar en la máxima instancia el crédito otorgado, así como el apoyo de la República Popular de China, por lo que no están dispuestos a correr ningún riesgo al respecto.
Cabe resaltar que diputados de varias fracciones señalaron a los jerarcas en comparecencias ante varias comisiones legislativas, la importancia de que el contrato fuera re negociado para poder aprobarlo desde el Plenario legislativo.
Por otra parte, tanto Segnini como González indicaron que la agenda de trabajo en el país asiático se dividirá en tres ámbitos.
El primero, serán los procesos de diálogos, los personeros del Poder Ejecutivo señalaron que expresarán sus observaciones sobre los términos del contrato, con el objetivo de que se impulsen más negociaciones con el Banco de Importación y Exportación de China con la empresa CHEC. Así como también, se buscará ampliar el marco de cooperación entre ambas Repúblicas.
La segunda área, será poder vincular una estrategia para cubrir costos no estipulados en el contrato actual desde los fondos aprobados por el Banco Chino. En la misma línea, el Poder Ejecutivo costarricense quiere crear una unidad fiscalizadora que administre todos los fondos referentes al proyecto.
Con base en el segundo ámbito de negociación, los Ministros consensuarán un diálogo de índole legal, enfocado principalmente a la clausula que determina que en casi que se incumpla o se altere el contrato, Costa Rica debe renunciar a la inmunidad por motivos de soberanía, tomando en cuenta que existe la posibilidad de que la entidad bancaria podría obligar al Estado a pagar el crédito en forma inmediata y sin derecho a reclamar.
Como tercer y último punto a discutir en las mesas de diálogo, están la intención de definir la propiedad del ante proyecto, con el fin de que, en tal caso que no logre un acuerdo preliminar respecto al diseño actual, este pueda pasar a manos del Consejo Nacional de Vialidad (CONAVI), para su eventual análisis y mejoramiento respectivo.