Kiev/Bruselas, 4 nov (dpa) – A pesar de las fuertes protestas del gobierno de Ucrania, los líderes separatistas Alexander Sjarchenko e Igor Plotniski tomaron hoy posesión del cargo de «líder de la República» de Donetsk y de Lugansk respectivamente, informó la televisión.
La cúpula pro-occidental en Kiev protestó contra el paso dado por los insurgentes y aseguró que esos cargos son ilegales ya que surgen de los comicios anticonstitucionales celebrados el domingo en la región del Donbas, en el este del país.
En la ceremonia participaron diputados rusos, así como combatientes armados. Rusia respaldó el resultado de los comicios, que le dieron un abrumador respaldo a los separatistas, mientras que Estados Unidos, la Unión Europea y Ucrania los rechazaron.
El Ministerio de Asuntos Exteriores en Kiev acusó a Rusia en duros términos de querer sabotear el proceso de paz y de ignorar los pasos acordados en la capital bielorrusa de Minsk en septiembre, según señaló un portavoz en la capital ucraniana. El vocero recordó que el acuerdo de Minsk prevé elecciones municipales según la ley ucraniana.
El presidente ucraniano, Petro Poroshenko, advirtió que considerará la posibilidad de anular las condiciones acordadas en septiembre ante la celebración de los comicios.
El mandatario tenía previsto reunirse con el Consejo de Seguridad en Kiev para analizar una posible derogación de la ley que concede a los separatistas, entre otros, tres años de autonomía parcial, así como una amnistía.
Los «bandidos y terroristas» han torpedeado la ley con las «pseudo elecciones» y han agravado considerablemente la situación en Donbás, dijo Poroshenko a la televisión.
Los insurgentes, por su parte, han advertido al gobierno central que no debería hacer fracasar el diálogo. El líder separatista Denis Pushilin dijo a la televisión rusa Rossiya 24 que «las personas en Donbás han permanecido demasiado tiempo en la oscuridad» y aseguró que por ello los insurgentes tuvieron que actuar y organizar las elecciones.
La amenaza de Poroshenko de volver a suspender la ley sobre una autonomía parcial fue calificada por Pushilin de «ataque histérico» del jefe de Estado pro europeo.
Por su parte, el ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Pavel Klimkin, aseguró que el gobierno central recuperará el control de las regiones del este del país. «En efecto, algunas regiones del este de Ucrania están bajo el control de terroristas prorrusos y tropas rusas, pero son regiones ucranianas y nosotros las recuperaremos», subrayó el ministro.
Klimkin instó además a las potencias occidentales a endurecer las sanciones contra Rusia. Al respecto, la canciller alemana, Angela Merkel, dijo hoy en Berlín que quiere seguir manteniendo las sanciones a Rusia por este conflicto. «En este momento no hay razón alguna para suspenderlas», señaló.
Por su parte, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo hoy que se vieron tropas rusas movilizándose hacia la frontera con Ucrania e instó a Moscú a realizar «esfuerzos genuinos» para resolver la crisis en el este de la ex república soviética.
«Recientemente hemos (…) visto tropas rusas movilizándose cerca de la frontera con Ucrania», dijo Stoltenberg en Bruselas.
«Rusia continúa apoyando a los separatistas al entrenarlos, suministrarles equipos y (…) con fuerzas rusas especial en partes del este de Ucrania», añadió.
En tanto, al este de Ucrania llegó otro convoy ruso con 20 camiones que transportan unas 100 toneladas de ayuda humanitaria para Donetsk y Lugansk. Se trata del sexto envío de estas características. En los combates entre el Ejército ucraniano y los insurgentes prorrusos han muerto desde abril más de 4.000 personas.