Foto extraída de nota en internet
Como previsible consecuencia del gesto de Suecia hacia Palestina del pasado 30 de octubre del 2014, el debate sobre el reconocimiento de Palestina como Estado se ha instalado en varios Estados europeos, incluyendo a Francia. Luego del debate parlamentario sobre el reconocimiento de Palestina como Estado que se inició el pasado viernes 28 de noviembre en París, el texto que “invita” al Ejecutivo a reconocer a Palestina fue votado este Martes 2 de diciembre obteniendo 339 votos a favor, 151 votos en contra y 16 abstenciones (texto reproducido al final de este artículo). El Ministro de Asuntos Exteriores francés presentó la posición oficial del Ejecutivo en la sesión parlamentaria del 28 de noviembre (ver el texto de su alocución) indicando en una parte de su discurso que una “invitación” del Congreso al Ejecutivo no contraviene en lo más mínimo con las reglas imperantes en la materia.
Este voto en Francia se da a escazas semanas del voto acaecido en el Congreso en España (ver breve análisis publicado en Derechoaldia.com) y un mes después del reconocimiento formal por parte de Suecia del 30 de octubre antes mencionado (Nota 1). Durante ese mismo mes del 2014, los parlamentos de Reino Unido (13 de octubre) y de Irlanda (22 de octubre) habían realizado votaciones similares a las realizadas en España y ahora en Francia. La otra cámara del Poder Legislativo francés, el Senado, conocerá el próximo 11 de diciembre una propuesta muy similar. Esta situación en Francia se da mientras que el debate sobre el reconocimiento de Palestina se ha intensificado en otros Estados europeos tales como Luxemburgo (ver nota de prensa), Bélgica (ver propuesta de resolución depositada el 21/11/2014), o Dinamarca (ver nota de prensa), para citar tan solo unos ejemplos.
Nótese que esta innovación de los parlamentos británico, irlandés, español y francés posiblemente guarde relación con la extraña sensación de incapacidad del Ejecutivo para liberarse de algún tipo de presión que le impida proceder a este reconocimiento. El reconocimiento de un Estado por otro Estado constituye un gesto relativamente simple de realizar, como todo acto jurídico unilateral de un Estado en derecho internacional público. Se plasma en una declaración oficial que no requiere mayor exigencia en cuanto a la forma: puede tratarse de una nota oficial elaborada como fue el caso del reconocimiento de Palestina por parte de Brasil en diciembre del 2010 (ver texto de comunicado oficial); o bien más de una nota más escueta, como la del Uruguay con fecha de marzo del 2011 (ver texto de comunicado oficial) o la de El Salvador de agosto del 2011 (ver texto del comunicado oficial) para citar algunos ejemplos. En el caso del reconocimiento de Palestina asistimos a las mismas presiones y amenazas de unos y a temores de otros basándose en una batería (bastante conocida) de argumentos oídos en Costa Rica en febrero del 2008 (Nota 2), en Guatemala en abril del 2013 (Nota 3) y recientemente en Madrid (Nota 4). Estos argumentos parecieran hacer a un lado el hecho que son ya, con Suecia, 134 Estados los que han contado con una voluntad política de sus mandatarios lo suficientemente firme como para hacer efectivo este reconocimiento de Palestina.
Nota 1: Remitimos al lector a un análisis más pormenorizado de este gesto de Suecia desde la perspectiva del derecho internacional, y de sus perspectivas en Europa titulado “La reconnaissance récente de la Palestine par la Suède: perspectives”, publicado en el Boletín Sentinelle, (Núm. 413) de la Société Française pour le Droit International – SFDI.
Nota 2: La reacción oficial israelí al reconocimiento del Estado palestino por parte de Costa Rica en el mes de febrero del 2008 se lee así: “Establecer relaciones con un Estado que no existe compromete el desarrollo de los acuerdos definidos entre israelitas y palestinos, va en contra de la Hoja de Ruta, actividades del Cuarteto y otros esfuerzos para la paz. Estos acontecimientos van en contra de los acuerdos, incluso, de la comunidad internacional y, podrían dañar los esfuerzos para alcanzar la paz entre ambas partes” (La Prensa Libre -Costa Rica- del 28/02/2008, entrevista a Ehud Eitam, embajador de Israel en Costa Rica).
Nota 3: En Guatemala la Embajada de Israel reaccionó de la siguiente manera al reconocimiento de Palestina realizado en abril del 2013: “Esta decisión no apoya el proceso de paz, el conflicto no se resolverá sin negociaciones y el reconocimiento no alienta a los palestinos a volver a negociar”: ver nota de la Prensa Libre disponible aquí.
Nota 4: Con relación a la declaración del Congreso español del pasado 18 de noviembre del 2014, la embajada de Israel en España indicó en su sitio que: “La declaración del Congreso de los Diputados de España aleja las posibilidades de alcanzar un acuerdo entre Israel y los palestinos, ya que anima a los palestinos a tomar posiciones extremistas”. Muy distinta fue la reacción israelí a una resolución del parlamento de Galicia en mayo del 2014: al adoptar una modesta resolución en señal de solidaridad con el pueblo palestino: los diplomáticos de Israel no dudaron en considerarla como una ofensa, calificando el hecho de extrema gravedad y señalando que ”Con esta exigencia, el Parlamento de Galicia se une a los peores y más extremistas enemigos de Israel» (ver nota de prensa).
El texto de la Assemblée Nationale aprobado este 2 de diciembre es el siguiente:
Article unique
L’Assemblée nationale,
Vu l’article 34-1 de la Constitution,
Vu l’article 136 du Règlement,
Affirme sa volonté de concourir à l’effort international de paix au Proche-Orient ; Constatant la volonté des peuples israélien et palestinien de vivre en paix et en sécurité ;
Constatant l’échec des tentatives de relance du processus de paix engagées depuis 1991 entre Israéliens et Palestiniens par la communauté internationale ;
Constatant les menaces pesant sur la solution des deux États, et notamment la poursuite illégale de la colonisation dans les territoires palestiniens qui mine la viabilité même d’un État palestinien, malgré les capacités institutionnelles dont s’est dotée l’Autorité palestinienne et la reconnaissance que lui a accordée l’Assemblée générale des Nations Unies; Constatant la montée des tensions à Jérusalem et en Cisjordanie qui menace d’engendrer un nouveau cycle de violence néfaste pour l’ensemble des populations de la région;
- Souligne que le statu quo est intenable et dangereux car il nourrit les frustrations et la défiance croissante entre les deux parties;
- Souligne l’impératif d’une reprise rapide des négociations entre les parties selon des paramètres clairs et un calendrier déterminé;
- Affirme l’urgente nécessité d’aboutir à un règlement définitif du conflit permettant l’établissement d’un État démocratique et souverain de Palestine en paix et en sécurité aux côtés d’Israël, sur la base des lignes de 1967, avec Jérusalem pour capitale de ces deux États, et fondé sur une reconnaissance mutuelle;
Affirme que la solution des deux États, promue avec constance par la France et l’Union européenne, suppose la reconnaissance de l’État de Palestine aux côtés de celui d’Israël;
- Invite le Gouvernement français à reconnaître l’État de Palestine en vue d’obtenir un règlement définitif du conflit.
(*) Nicolás Boeglin, Profesor de Derecho Internacional Público, Facultad de Derecho, Universidad de Costa Rica (UCR).