San Francisco, 7 ene (dpa) – Dos escaladores estadounidenses están a mitad de camino de alcanzar sin cuerdas la cima de la pared de granito El Capitán, de 800 metros y considerada como la más difícil del mundo.
Kevin Jorgeson, de 30 años, y Tommy Caldwell, de 36, sólo están usando sus manos y sus pies para subir El Capitán, situada en el Parque Nacional Yosemite, en California. Es el mayor monolito de granito del mundo y se eleva más de 910 metros sobre el valle Yosemite.
Ambos buscan ser los primeros en avanzar por la ruta más compleja, conocida como Dawn Wall, y hacer cima sin usar cuerdas, que están listas sólo en caso en caída.
Durante la escalada, que podría concluir viernes o sábado, Jorgeson y Caldwell comen y duermen en tiendas colgantes y se comunican con los aficionados e interesados a través de las redes sociales.