Guatemala, 18 mar (EFE).- La Fundación Rigoberta Menchú exigió hoy al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que anule la declaración de Venezuela como «amenaza nacional» y que derogue la Ley de Sanciones contra funcionarios del país suramericano para honrar así «la paz y la armonía mundial».
La organización manifestó en un comunicado, después de que en días pasados el Gobierno estadounidense señalase a Venezuela como una «amenaza extraordinaria» para su seguridad, que estas acciones son «lesivas» a la soberanía del país caribeño.
Señaló que, históricamente, el «imperialismo norteamericano» se ha caracterizado por intervenir en aquellas naciones que se han negado a aceptar sus «imposiciones políticas y económicas», como es el caso.
Aseguró que las relaciones internacionales deben basarse en «el respeto entre naciones y entre pueblos», ya que, a su juicio, ningún Estado tiene el derecho de intervenir en los «asuntos internos» de otro y, menos, decidir sobre su futuro, «como pretende Estados Unidos», apostilló.
«Las intervenciones militares y golpistas jamás han resuelto los problemas sociales, políticos y económicos en ningún país del mundo; al contrario, desencadenan una serie de violaciones a los derechos humanos, convirtiéndose en justificaciones para el saqueo y el enriquecimiento ilícito», explicó el documento.
Para la fundación de Rigoberta Menchú, líder indígena guatemalteca y premio Nobel de la Paz en 1992, Venezuela es un país con una «enorme riqueza natural y energética», además de ser uno de los más importantes proveedores de petróleo, tanto para Estados Unidos como para América Latina.
Venezuela exporta petróleo en condiciones ventajosas de pago a muchos países de la región a través de la plataforma Petrocaribe.
«Gracias a estos esfuerzos dignos y solidarios de Venezuela, se ha logrado fortalecer la economía latinoamericana», reiteró la organización.
Por ello, rechazó y condenó cualquier acción de «injerencia intervencionista» que viole la soberanía y la autodeterminación del pueblo y del Gobierno venezolano.
«Nos solidarizamos con el Pueblo y Gobierno de Venezuela, con sus instituciones democráticas, socialistas y con el Presidente Nicolás Maduro, asimismo con las acciones y decisiones tomadas en defensa de su soberanía y libre autodeterminación», subrayó.
El comunicado concluye haciendo un llamamiento a todos los sectores para estar «vigilantes» ante las diversas acciones de intervención que proponga la nación norteamericana.