París, 3 abr (dpa) – La Asamblea Nacional de Francia decidió hoy incluir en el proyecto de reforma de salud una enmienda que podría desterrar a las modelos ultradelgadas de las pasarelas.
Si esta enmienda contra el avance de la anorexia prospera y se transforma en ley, en los desfiles de moda en Francia o en las sesiones de fotos sólo podrán trabajar aquellas modelos que superen cierto índice de masa corporal (el peso en relación con la altura).
La ministra de Salud de Francia, Marisol Touraine, apoyó la moción y calificó la presentación de modelos extremadamente delgadas como un «tema preocupante».
La prohibición ya rige en países como Israel, mientras que en Italia el gobierno acordó en 2006 con el gremio de la moda de ese país una declaración de principios contra la anorexia. Desde entonces, muchos diseñadores apuestan a modelos más curvilíneas en sus desfiles en Milán y rechazan el ideal de belleza ultradelgada.
El tema de la delgadez extrema en la moda también es recurrente en otros países europeos. En muchos de ellos, las propias asociaciones de modas o los propios diseñadores optaron por comprometerse a no trabajar con modelos demasiado delgadas.
La resolución de la Cámara baja del Parlamento francés indica que el índice de masa corporal mínimo será fijado en función de lo que recomienden expertos en el área de salud. Aquel que trabaje con modelos que estén por debajo de ese límite podrá ser condenado a una pena de hasta seis meses de prisión y a una multa de 75.000 euros (más de 82.00 dólares).
El proyecto es controvertido. Los diputados conservadores votaron en contra con el argumento de que esa prohibición de trabajar equivale a una forma de discriminación hacia aquellas personas que son delgadas por naturaleza.
El proyecto de ley será votado por la Asamblea Nacional en abril y pasará luego al Senado, donde el gobierno es minoría.
También las agencias de modelos expresaron su rechazo. El SYNAM, el sindicato Nacional de Agencias de Modelos de Francia, opinó que es un error confundir la delgadez de las modelos con la anorexia.
Su presidenta, Isabelle Saint-Félix, declaró a medios locales que esa confusión lleva a desconocer la anorexia como enfermedad determinada por razones psíquicas.
