jueves 30, marzo 2023
spot_img

¿Seguiremos inermes ante hegemonía mediática?

Desde hace bastante tiempo, la potencia que  pretende la hegemonía mundial, se propuso  ganar las mentes y corazones de las gentes para sus propósitos. La propaganda emocional, sugestiva, subliminal cobra cada día más fuerza, desplazando aquella dirigida a la razón. En las llamadas “guerras de cuarta generación”, según la jerga militar norteamericana, la parte mediática es un frente más de la contienda, y cada vez adquiere más preponderancia.

En medio de ese ajedrez político nos encontramos nosotros.

Dice la historia que  el empresario del periodismo William Randolph Hearst envió  un reportero  a Cuba a cubrir la guerra. Poco tiempo después éste  le reclamaría:- Señor Hearst, pero si aquí no hay guerra. Él le contestó: -Usted encárguese de las fotos, nosotros le pondremos la guerra. Pronto se produciría la explosión del buque Maine en la bahía de la Habana, que serviría de pretexto para desatar la guerra De Estados Unidos contra España a fin de arrebatarle sus colonias. Ahí floreció el periodismo con fines políticos y el amarillismo.

Sin embargo, así como a la prensa se le señalan estos defectos, no sería justo dejar de reconocer cómo valientes periodistas se ha encargado de poner los puntos sobre las íes en numerosos casos, como por ejemplo el espionaje en el caso denominado  Watergate, que llevó a renunciar al presidente de los EEUU, Richard Nixon. Desgraciadamente esa cultura que en algún momento enalteció al periodismo norteamericano, cada vez está más devaluada.

Conocido es el imperio de medios de comunicación que maneja el magnate australiano nacionalizado estadounidense  Keith Rupert Murdoch, el cual que comprende medios tales como The Sun y The Times y cadenas de televisión como Fox y Sky), la que es considerada la segunda corporación de medios de comunicación más grande e influyente del mundo. Gigantes así son los que hoy son conocidos como latifundios mediáticos y que se ha especializado en apoyar las peores causas incluida la invasión de EEUU a Irak.

Del poder de los medios de comunicación, denominado ya en algunos países como el cuarto poder, fuimos testigos los costarricenses a principios de la década de los ochentas. Posteriormente a la caída de la dictadura de los Somoza, el Frente Sandinista de Liberación Nacional gozaba de un apoyo de más del 85% de la población y cuando el gobierno de Ronald Reagan lanzó su guerra contra Nicaragua financiado y abasteciendo a la llamada “contra”, fue orquestada a través de la Embajada de EEUU en Costa Rica una despiadada campaña para revertir esta situación y facilitar así el uso de nuestro territorio por parte de la contra. Instalaron la llamada Radio Costa Rica (VOA) en Grecia de Alajuela, crearon CANARA que fue la columna vertebral de esa campaña y hasta se inventaron cantar el Himno Nacional frente a Radio Monumental. Como consecuencia de esa campaña que nada tenía que envidiarle a quien acuñara aquella famosa frase de “miente, miente que algo queda”, en término de tres meses ese apoyo al FSLN había sido reducido a tan solo un 3%

Hoy en día  la SIP (Sociedad Interamericana de Prensa) que reúne a las más  poderosas empresas del periodismo y la comunicación en nuestro continente continúa esa labor.

En varios países América Latina se han venido realizando  esfuerzos por blindarse ante estos latifundios mediáticos que son casi exclusivas correas de transmisión de las agencias internacionales de prensa como UPI; AFP;AP; EFE, etc., es decir de garantizar que los pueblos puedan recibir, diversidad de información que les permita a las personas formarse una propia opinión y no estar bombardeados unidireccionalmente y con exclusividad de esa única visión de las cosas.

Desgraciadamente estos esfuerzos han afectado intereses económicos empresariales que han utilizado todas sus influencias por demonizarlos, realizando intensivas campañas para acusar a estos gobiernos de atentar contra la libertad de prensa.

Nos tocó el turno

En Costa Rica, la necesidad de actualizar la legislación sobre medios de comunicación y en general las regulaciones a la explotación del espectro radioelectrónico, llevó al gobierno de LGSR y al Ministerio de Ciencia y Tecnología a provocar un debate al respecto y comenzar a construir un borrador de Ley para ponerlo en discusión en la Asamblea Legislativa.

Pero la reacción no se hizo esperar, ya no solo Ignacio Santos y Canal 7, La Nación, el programa de Amelia Rueda y otros  se sumaron  en  Santa cruzada. Los poderosos medios de comunicación empresariales en costa Rica parecieran  intocables. Sus privilegios no soportan el rumor siquiera de una regulación a la ley de medios para democratizar el derecho a la información del pueblo costarricense.

Según explicaba en una emisora una funcionaria del ministerio proponente de esta nueva ley sobre comunicaciones, los artículos que están objetando forman parte de la ley vigente desde 1954. Aquí de lo que se trata es demonizar esta propuesta, simplemente calificándola como chavista.

Artículo 17.-Es absolutamente prohibido:

  1. a) La trasmisión y recepción de correspondencia privada, salvo expresa autorización del autor o la divulgación del contenido o de la existencia de dicha correspondencia, en caso de llegarse a interceptar;
  2. b) La trasmisión o circulación de noticias falsas, señales o llamadas de alarma sin fundamento;c) La retransmisión de programas de radiodifusión provenientes de otras estaciones sin el consentimiento expreso de los interesados.
  3. ch) El uso de lenguaje vulgar o contrario a las buenas costumbres;
  4. d) Usar lenguaje injurioso que perjudique el honor e interés personales.

Debemos escuchar opiniones.

Con la caballerosidad que lo caracteriza, Orlando Castro Quesada, director de CANARA, afirma lo siguiente:

“El argumento usado de fachada es que la ley de radio… de 1954 está obsoleta; sin embargo, no han presentado un solo argumento que demuestre la eficacia de tal decir. Nuestra Constitución es de 1949 y no falta quien la defienda a capa y espada. Otro argumento está en los bajos montos que los concesionarios de radio y televisión pagan por la concesión. Para tu información CANARA, conscientes de esto, en el pasado, mandó varios proyectos de ley a la Asamblea Legislativa para que se aumentara el monto del pago pero los diputados de turno nunca le dieron la importancia debida. Y el argumento tercero es que existe gran concentración de los medios de comunicación; en el caso específico de los asociados a CANARA, te puedo asegurar con toda propiedad, que la inmensa mayoría son pequeños empresarios, que diariamente, hacen grandes esfuerzos para cumplir con sus obligaciones. Si se habla de chavismo es porque el enfoque del proyecto es muy similar a las leyes que su momento Chávez promulgó y cuyos efectos son de todos conocidos”

Un intelectual como el economista Luis Paulino Vargas nos dice lo siguiente:

”Estoy absolutamente convencido que urge inyectar pluralismo en el espacio informativo costarricense, hoy sometido al imperio intolerante e intransigente de un pequeño número de poderosas empresas mediáticas, dedicadas a difundir un único punto de vista y a censurar e invisibilizar cualquier cosa que se salga de esa norma. No tengo problema en que esas empresas periodísticas sigan informando como lo hacen, pero sí urge es que otros medios generen la posibilidad de que otros puntos de vista también se expresen”.

Al presidente hondureño Mel Zelaya le dieron un golpe de Estado por querer hacer una consulta al pueblo sobre una constituyente. Claro, lo que querían era sacar a Honduras del ALBA. Lo vinieron a tirar en piyama a Costa Rica en contubernio ustedes saben con quién. Ahora, por mucho menos, el poder mediático costarricense está a punto de linchar al presidente LGSR, por el pecado de poner a debate reformas necesarias a la obsoleta Ley que regula el espectro radioelectrónico. De verdad que en intolerancia no nos diferenciamos mucho.

Juan Félix Montero Aguilar es Analista político costarricense.

Más noticias

7 COMENTARIOS

  1. Y la ley que establece la publicacion de los accionistas de los medios de comunicacion,,la7220 o 6220,quien la cumple ?
    Es importante que las empresas de comunicacion, si bien son privadas, es importante conocer sus propietarios y por ende su linea editorial..Todos tenemos dercho a pensar y aopinar libremente.,al menos en la Costa Rica actual.
    Hemos visto en paises como Nicaragua y Venezuela que los medios han pasado de una u otra manera a familiares o socios del regimen en el poder.Eso me parece una situacion mas grave. de la que no se habla.

  2. Claro que hacen falta cambios pues el medio que diga que no censura que tire la primera piedra !!!. PERO NO VAMOS A SALIR DE GUATEMALA PARA ENTRAR A GUATEPEOR !!!, con todo respeto para el hermano país. El Proyecto Mordaza retirado era una vergüenza nacional !!!, servido con cero inteligencia para que los «compadres nos defendieran» !.

  3. Para los que ya le dimos una «leidita» al BORRADOR que presentó el MICITT sobre medios de comunicación y el espectro radioeléctrico habremos notado fácilmente que en él lo referente a sanciones es una copia de lo que actualmente está vigente en la ley que data de 1947. En segundo lugar, está claro que el 90% o más de ese BORRADOR se refiere al espectro radioeléctrico, su marco legal y técnico, el cual definitivamente hay que actualizar. Me extraña que siendo esta la realidad algunas personas se empeñan en atacar y atacar dejando totalmente de lado el 90% o más del susodicho BORADOR; serán ganas de joder o más bien una campaña mediática cuyos objetivos son inconfesables, vaya usted a saber.

  4. Como dije en otro comentario, lo que en realidad defienden los medios y propiamente sus dueños, no es la libertad de expresión y de prensa, sino su derecho exclusivo y monopólico sobre la censura o limitación de la libertad de expresión a través de sus medios.

  5. No chupemos dedo ni caramelos. Será que es mejor que los dueños de los medios detenten el poder monopólico y exclusivo a la censura o que lo detente el Estado; ninguno de los dos extremos es aceptable. En realidad en la casi totalidad del planeta los dueños de los medios forman parte consustancial de los gobernantes y a la inversa , y cuando se dan excepciones como es el caso del actual gobierno de LGS y este toma distancia de los poderes fácticos tradicionales lo que inevitablemente se le desata es la guerra de cuarta generación donde los medios juegan un papel preponderante.

  6. Los medios, esos que se creen «grandes» quieren perjudicar por donde sea a LGS, y es que los grandes escándalos son chismes de Los intrusos, nada trascendental para el país, nada de peso, solo tonterías, pequeñeces que con grandilocuencia ridícula, algunos medios han inflado e inflado.
    No nos engañemos a los medios a mejor dicho a muchos de ellos les vale un pepino nuestra libertad de prensa, los que les interesa es seguir usando ese poder para su propio beneficio.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Últimas Noticias