Caracas, 14 abr (EFE).- El jefe de Estado de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo hoy que de su boca «no saldrá nada» sobre el breve encuentro que sostuvo con el presidente de EEUU, Barack Obama, en el marco de la VII Cumbre de las Américas al salir al paso a supuestos rumores de que llegó a esa conversación «casi de rodillas».
«Comienzan a lanzar cosas para tratar de que parezca que yo llegué casi de rodillas (…) yo pudiera decir todo, las condiciones en que se dio el encuentro (…) de mi boca no saldrá nada, así ustedes actúen como actúan, imperialistas del norte», dijo el presidente durante su programa de radio y televisión «En Contacto con Maduro».
Comentó que las relaciones diplomáticas «no son una improvisación» y tras señalar que respeta a los «señores del Departamento de Estado y de la Casa Blanca» dijo que no hará nada para «desmeritar» las condiciones en las que se dio el encuentro.
Recordó que durante la cumbre dijo públicamente «las cuatro exigencias sine qua non para iniciar una nueva era de relaciones respetuosas, pacíficas y de conveniencia mutua» entre Estados Unidos y Venezuela.
Dijo que pidió a EEUU «reconocer la soberanía» de Venezuela y derogar el decreto firmado por Obama en marzo pasado en que se declara a Venezuela una amenaza y se sanciona a un grupo de funcionarios.
También exigió que se desmonte la supuesta «maquinaria de guerra» que funciona en la embajada estadounidense en Venezuela, así como «la conspiración de Miami» contra su gobierno.
Además, pidió a EEUU que hiciera un «gesto positivo» al dar el beneplácito al encargado de negocios de Venezuela en Washington, Maximilian Arveláez para que sea aceptado como embajador pues ya han pasado 13 meses desde que se hizo la solicitud y aún no ha sido aprobado.
Indicó que va a dejar que «evolucionen estas conversaciones» que sostuvo con el consejero del Departamento de Estado Thomas Shannon poco antes de la cumbre para dar una «oportunidad» a la diplomacia «para que se corrija esto».