Ciudad de México, 23 sep (dpa) – Las fuerzas armadas mexicanas fueron notificadas con más de una hora de retraso sobre la fuga del narcotraficante Joaquín «El Chapo» Guzmán de una cárcel de máxima seguridad el 11 de julio, informó «Radio Fórmula».
«El Chapo» se introdujo a las 20:52 en un túnel subterráneo de 1,5 kilómetros que partía del área de ducha de su celda y desembocaba en una construcción y que contaba con alumbrado y sistema de ventilación.
El Ejército fue avisado a las 22:00 y la Secretaría de la Marina, que había logrado su captura en febrero del año pasado, fue informada a las 00:45.
La información fue proporcionada por ambas dependencias en respuesta a una solicitud de acceso a la información realizada por un periodista, que pidió los mismos datos a la Secretaría de Gobernación (responsable de los penales) y a la Procuraduría General de la República, pero aún no ha obtenido respuesta.
«El Chapo» estaba recluido en el penal de máxima seguridad del Altiplano, en el municipio de Almoloya de Juárez, unos 90 kilómetros al oeste de la Ciudad de México.
El exdirector de la cárcel, Valentín Cárdenas Lerma, y varios funcionarios del penal fueron detenidos.
Al responsable del penal se le acusa, entre otras omisiones, de no haber activado el «código rojo» de inmediato, aunque supo de la evasión ocho minutos después, según informó el diario «La Jornada» que tuvo acceso al expediente judicial.
El líder del cártel de Sinaloa, que ya se había fugado de una cárcel en 2001, es nuevamente el narcotraficante más buscado del mundo. Estados Unidos ofrece una recompensa de cinco millones de dólares por información para su captura y ha pedido su extradición.
La fiscalía general de México dio a conocer que un juez concedió ya una segunda orden de detención con fines de extradición en contra de «El Chapo».
El capo es requerido por una corte federal de Texas por asociación delictiva, delincuencia organizada, narcotráfico, lavado de dinero, homicidio y posesión de armas de fuego.