Hoy día la historia se repite de una forma cíclica pero a otro nivel superior, se ha sumergido al mundo en otra especie de guerra mundial. Las amenazas nucleares y ambientales son cada vez más graves y delicadas, aquella famosa frase de Hobbes que decía “el hombre es el lobo del hombre” parece describir la disputa actual por el control del poder mundial, en otras palabras, por el dominio de zonas ricas en recursos naturales y materias primas cada vez más escasas y necesitadas por la industria, así como de puntos geoestratégicos indispensables para la seguridad nacional de aquellas potencias que están luchando por lo mismo. Todos entienden que la situación objetiva del planeta es crítica y que lo único que les queda es tener control de esos espacios (mismos que incluyen todas las formas de vida existentes, recordemos que ya también tienen un valor en el mercado).
El actual conflicto en Ucrania, desde un punto de vista geopolítico podríamos afirmar que es el reflejo de la contradicción natural entre la civilización del mar o talasocracia atlantista encabezada por EEUU y Europa contra la civilización de la tierra ubicada en el heartland o telurocracia (Euroasia o lo que antiguamente era la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas). Resulta que ha sido Vladimir Putin, quién ha tenido el coraje de enfrentar al poder atlantista, de mostrar al mundo que sus ideas de nuevo orden unipolar se acabaron y que el orden internacional debe cambiar. La estructura de ese viejo mundo hace aguas, es por ello que la guerra indefinida se torna ley y el orden jurídico internacional se rompe, nos encontramos entonces ante una transición y reestructuración del Sistema Internacional.
Es por ello que la posición de Rusia asusta a occidente y que éste apoya a Poroshenko (y a los grupos neonazis que siembran verdadero terror en ese país). Tener acceso militar y control de Ucrania es fundamental para cercar y preparar un ataque contra Rusia. Hace unos días, el excomandante de las milicias que luchan contra el ejército ucraniano, Igor Strelkov, compareció ante las cámaras y explicó con lujo de detalles los planes que tiene occidente contra Rusia así como la razón de ser de prolongar la guerra en Ucrania. Lo interesante es que plantea que ellos no desean unirse a Rusia, pero que la defienden, la ven como su aliado natural, por esto y por la libertad y autodeterminación de sus pueblos es que aún siguen resistiendo. Recordemos que Lugansk y Donestk, hoy autoproclamados como Nueva Rusia, son territorios cuya población es rusa, cuya cultura (como por ejemplo la cosaca) es una de apego a sus raíces a la tierra (telurocracia), sus costumbres, de defensa del suelo y del no permitir que les impongan a la fuerza modelos de tipo económico, social, político o cultural. No olvidemos que la formación que reciben estas personas desde muy temprana edad, les hace ser verdaderos partisanos, que están dispuestos a dar su vida por la libertad de su patria.
El plan es crear un Maidan (primavera) en Moscú, «hay una quinta columna que está trabajando en ello», afirma el comandante. Prolongar la guerra en Ucrania para debilitar a las milicias, recuperar los territorios «rebeldes», mantener el desgaste psicológico y la presión internacional contra Rusia, generar una gran cantidad de refugiados que Rusia tendría que acoger porque irían hacia allá, de la mano de la profundización de las sanciones económicas contra este país, mismas que empezarán a ahogar a los oligarcas rusos que empezarán de inmediato a pasar la factura de eso al pueblo y una vez que estén asfixiándose, levantar un movimiento contra Putin y sacar a la gente a las calles. Incluso autores como el especialista en geopolítica Mahdi Darius Nazemroaya del Global Research Institute de Canadá, ha mostrado mapas de lo que sería una Rusia desmembrada y dividida, lo que plantean estos analistas es que el plan que aplicó occidente para desintegrar la Unión soviética está siendo retomado y se está aplicando nuevamente. Cabe recordar que parte de esos planes iban por la manipulación mediática, el ataque a la moral del pueblo soviético, al ataque a las costumbres, los valores y todo aquello que de sentido de pertenencia e identidad al país, algo que la ideología de la globalización ha sabido muy bien hacer en la mayoría de países donde su lógica se ha tratado de implementar al pie de la letra.
Así que la situación es realmente delicada y convulsa, no es tan sencillo y la preocupación mayor es que se intenten crear provocaciones que obliguen ya sea al ejército ruso o ucraniano (EEUU-OTAN) a intervenir con la fuerza, lo que detonaría un conflicto a gran escala. Lo que ocultan a la opinión pública dice el comandante Strelkov es que occidente habla de negociación, una que en los términos en que la están poniendo, es prácticamente la capitulación de Rusia y los territorios de Nueva Rusia, recordemos que todo esto ha sido por la disputa entre oligarquías, unas a favor de Rusia y otras completamente pro occidentales. No debemos de perder la atención de lo que sigue sucediendo en Ucrania por darle más importancia a lo que acontece en Siria, ya que es otro escenario más de esta guerra mundial y en cualquier momento nos puede volver a sorprender.
(*) Mauricio Ramírez Núñez, magister en estudios latinoamericanos con énfasis en cultura y desarrollo.
Rusia es un pais muy viejo pero tambien muy unido, muy orgullosos de ser el pais mas grande del mundo, por lo tanto repleto de recursos que en caso de guerra son muy duros y han podido doblar a sus enemigos aun con mucha superioridad tecnológica.
USA es un pais muy desunido, se ven como enemigos negros-blancos-latinos, su orgullo nacional es de utilería porque en el fondo todos desean ser independientes y por si fuera poco tienen aliados muy poderosos pero eso no quiere decir que sean sus amigos, si son aliados es solo por conveniencia mutua.
En caso de guerra aun con embargos economicos la gente se podria a fabricar armamento y eso mejoraria el mercado interno ademas si fracasa Rusia, China se quedaria sola contra occidente asi que es muy probable que aunque no quieran terminan uniendose a el unico pais que les echó una mano cuando mas lo necesitaban. Ambos paises tienen los mismos obstáculos y eso desencadenaría una guerra mundial donde no veo un claro vencedor. La OTAN es muy poderosa pero China y Rusia no son Iraq y si no pudieron con Iraq menos con alguien mas poderoso.
Primer punto. Entre 1932 y 1933 el comunismo soviético asesinó por hambre (HOLOMODOR) en la zona de Doneskt y Lugansk a 5.000.000 de ucranianos católicos, y esa tierra vacía la pobló con rusos étnicos posteriormente. Es bueno indagar en la verdad para saber sobre las raíces del conflicto. Segundo punto, Nueva Rusia en realidad es una acción desestabilizadora del Putin-comunismo para lograr un renacimiento cultural del marxismo-neoliberal; no olvidemos que Putin es marxista declarado y nostálgico de la potencia genocida llamada URSS (el adlater de la otra potencia genocidad llamada Gran Bretaña-EEUU). El marxismo neoliberal se aplica hoy en China bajo una férrea dictadura comunista. Allí conviven la afluencia de capitales neoliberales dentro de un marco jurídico de dictadura brutal. Rusia está en una etapa intermedia, pues Putin controla todo el país a través de la KGB, la entidad de la cual surgieron muchos ultracapitalistas que son dueños de la riqueza de ese país. No es malo investigar, hay que sacarse los prejuicios de izquierda nada más.