El jueves de la semana pasada se dictó la sentencia del juicio entablado por la Contraloría General de la República en contra de Miguel Carabagías, inhabilitándolo por un periodo de ocho años para ocupar cargos públicos a partir de la sentencia, que con los dos anteriores de suspensión de medidas cautelares solicitado por su abogado defensor Fabián Volio Echeverría, de hecho lo inhabilita por diez años, con lo cual el señor Carabagías pierde las posibilidades de realizar su sueño, que era ser candidato a la presidencia de la república por el Partido Unidad Social Cristiana. La sólida argumentación realizada por la abogada que representaba la Contraloría General de la Republica, Francella Navarro, no dejó lugar a dudas de los delitos cometidos por el acusado, y la sentencia se dio sin mayores dubitaciones.
Sin embargo, ningún periódico del país le ha prestado atención al hecho, pues sería una cuenta más en el largo rosario de delitos cometidos por los políticos del Partido Social Cristiano, cuando ocupaban cargos públicos, lo cual no interesa en este momento festinar según los criterios de una prensa interesada y parcializada como la existe en nuestro país, condena que se suma a la reñida competencia que se lleva con los del Partido Liberación Nacional. Y la pegunta que surge de inmediato es ¿por qué los medios no informan absolutamente nada?
Sin embargo, y siguiendo quien sabe qué criterios, fundamentados en posibles móviles obscuros vinculados con el tráfico de influencias que se acostumbra en este país entre políticos y empresarios, se han festinado a varias columnas las aspiraciones presidenciales de Oscar Arias y José María Figueres, por el Partido Liberación Nacional, ambos expresidentes y ambos también de dudosísimo comportamiento en el manejo de la cosa pública y sus vínculos con empresas que, sustentadas en la forma de comportarse dentro de los parámetros neoliberales, buscan depredar todo lo posible un país, a través de contratos y concesiones de obra y servicios públicos.
Conversando con amigos sobre estos hechos todos concluyeron en que estas cosas suceden en nuestro país, la de comportamientos corruptos y de ex gobernantes cuestionados lanzándose a nuevas aspiraciones, porque los electores son absolutamente indolentes, y que esa indolencia nace de una enorme ignorancia. Y que el daño que le hicieron a la educación nacional las reformas educativas impulsadas por el neoliberalismo en los decenios pasados, se han concretado en una masa ignorante, despreocupada y fácil de embaucar con los más simples artilugios de la demagogia política. Y que ello pinta un muy triste futuro para el país.
La conversación giró posteriormente en la prácticamente desaparición de plataformas políticas, ideologías debidamente estructuradas y auténticos liderazgos en todos y cada uno de los partidos políticos de nuestro país, convirtiéndose en oferentes de liviandades a una ciudadanía solamente preocupada por sus propio bienestar y su capacidad de consumo. Que es precisamente hacia donde ha llevado la educación reformada de que hablamos arriba, hacia la superficialidad de los electores y la superficialidad de los candidatos.
Sin embargo, llama la atención la forma sistemática y recurrente con que los medios del Grupo Nación sacan a relucir cualquier gazapo del actual gobierno, magnificándolo y con la intención de que la ciudadanía se vaya convenciendo poco a poco que este gobierno no ha servido para nada, y que será uno más de la larga lista de los que ofrecieron cambios y mejoras durante la campaña y luego se durmieron plácidamente entre los sopores del poder. Pero algo aún más serio que todo lo anterior consiste en que escuché decir lo siguiente como slogan de la próxima campaña: desconfía de los académicos al momento de realizar ofertas… no conocen las turbias y fétidas aguas de la política local, y se convierten en un fracaso si logran triunfar…
Y sobre ello deberíamos ser sumamente claros. Reconocemos que el actual gobierno se ha quedado corto, muy corto, con relación a sus promesas, al punto de que muchos ciudadanos se encuentran absolutamente desencantados. Pero hay que tomar en consideración algo que mencioné hace ya unos dos años. Que no le dejarían gobernar por tres elementos importantísimos: no tiene mayoría parlamentaria y las alianzas, como se acostumbra en política, son tan endebles como alas de mariposa; todas las instituciones clave que pueden ayudar a funcionar o entorpecer un gobierno, incluyendo la Suprema Corte, están en manos de Liberación Nacional, lo cual significa ni más ni menos, que obedecen a las directrices del partido, a quien no interesa que este gobierno cumpla con sus promesas, sobre todo después de las acusaciones de corrupción de que fueron objeto durante la campaña política pasada y que les costó un número considerable de votos; y que los mandos medios de las organizaciones de Gobierno Central están casi cooptados por miembros del mismo partido. ¡Y ya sabemos lo que puede hacer la burocracia publica, sobre todo cuando sigue los lineamientos de un partido de oposición¡
Estamos llegando al final del segundo año de gobierno y ya se agitan las contiendas internas para las próximas elecciones, lo cual agrega un elemento adicional de entorpecimiento a la labor de gobierno. ¡Mal estamos y estaremos peor, si seguimos por este camino¡
La manipulación de la información, la tergiversación de los hechos, el ocultamiento o la saña con que se desatan campañas en contra de iniciativas gubernamentales que podrían afectar intereses privados de grupos políticos, económicos o sociales, es la característica del flujo de información nacional. Por ello concluimos los que conversábamos sobre la situación nacional actual que poco es lo que de informa y mucho sobre lo que no se informa, por los intereses que están detrás de los medios.
(*) Alfonso J. Palacios Echeverría
Por ello la existencia de elpais.cr y de articulistas como don Alfonso que nos dan a los lectores otros puntos de vista y opinion de los acontecimientos.
Deberian pensar en imprimir su periodico y distibuirlo por el pais,logrando una mayor audiencia.
Aunque suelo estar en desacuerdo con algunos de sus puntos de vista, en esta ocasión le doy mi apoyo a esta genial idea suya. ¿Dónde firmamos?
Sería excelente que el periódico digital El País CR distribuirlo en todo el territorio nacional , ya que es uno de los periódicos que se dedican a decir la verdad con estos periodistas tan buenos que no tienen pelos en la lengua, además de valientes,e inteligentes, profesionales de verdad,no como esos periodiquillos desinformadores que son parte de la familia del poder político,y del poder económico de este país, todos son una melcocha, son los están arruinando este país.
Y lo que más me gusta de este diario, que no pierden el tiempo vertiendo «noticias» BASURA de las FAR$ÁNDULAS!!! 🙂
Los medios de descomunicación costarricenses están alineados al empresariado, no informan o lo que informan siempre necesariamente va en favorecer o blindar los intereses de ese grupo. Pecado hablar de la ley de prensa porque todos en coro argumentan y lloran por lo que llaman la defensa de la «libertad de prensa», que es la libertad su libertad de deformar la realidad siempre a su favor, de manipular, de incluso tergiversar las cosas para confundir y engañar.
Muchos medios se han autoproclamado un poder, y ellos hacen y deshacen a su antojo y el que falte, el que intente siquiera contradecirlos serán aniquilados por esta mafia que aunísono hará creer lo que ellos digan, porque si ellos lo dicen es la verdad.
Y el pueblo aborregado…está en nada de tonto útil.
Hay algo en que no estoy de acuerdo con el autor, y es sobre el antepenúltimo párrafo, porque pretende decir que el poder ejecutivo de un gobierno legítimamente electo debería de poder hacer lo que le diera en gana (suponiendo que eso sea su plan de gobierno), sin ningún tipo de impedimento; casi hasta autoritariamente. Pero, ¿echarle la culpa a otro partido por las estructuras que ha «montado» en otros poderes? Es decir: si sabe que desde un principio está luchando frente a una fuerza política importante que trasciende los tres poderes de la República, y que le van a hacer la vida a palitos, entonces, ¿para qué se tira al agua? Tal vez, como toda empresa, es una apuesta a ciegas, pero, ¿mancharse el nombre sólo por eso?
Personalmente, no creo que el PLN sea TAN fuerte como parece hacernos creer don Alfonso, sino, que el gobierno no ha encontrado la estrategia ideal para lograr hacer lo que se propuso… Que es lo mismo que hacen (o no hacen) la mayoría de los gobiernos… No gobernar es también una forma de gobernar…
El PAC fue a 2da ronda contra un candidado que había decidido rendirse desde el resultado de la primera ronda, el resto es y será historia…
Excelente artículo. Todavía existen ingenuos que creen en la desinformación de los medios de comunicación. Acá «ELPAÍSCR», es uno de los pocos que informan de una forma más veraz, lástima que no sea el grueso de la población, el que lea este medio. Don Alfonso usa una palabra que describe a la perfección, a ciertos políticos y empresas de este país, «DEPREDADORES», eso es le que en realidad son; no están por el bien común del ciudadano, ni mucho menos el de Costa Rica.
la unica manera seria que en Costa Rica todos los alcornoques que se dedican a tatuarse, a ver combate y a jugar de vivos en las playas locales y en Palmares decidieran por alguna vez en su vida ponerse a pensar y cambiar la forma en que son, dejarse de tanta payasada y revelarse contra el sistema….pero eso es muy dificil. Ahi seguiran los semi-profesionalillos que graduan las unviersidades locales jugando de gatos muy instruidos y viendo como el pais que sus ineducados y machistas abuelos si tuvieron los cojones para construir, en tanto estos delicaditos amanerados se dedican a sus veleidades…algunos se quedaran a seguir sufriendo la inexorable condicion de decaimiento, a otros no les quedara mas que considerar la posibilidad de emigrar (si es que queda adonde huir en un sistema occidental economico que tambien huele a podrido)
Muy valiente esta publicación, con claros señalamientos de actitudes parcializadas de entidades pùblicas.
Gracias a este medio digital «El Pais» que nos permite acceder a este valioso articulo de don Alfonso Palacios, muchos costarricenses, amantes de nuestra Patria, nos sentimos hondamente preocupados por el juego de intereses de poder y economicos – muy escondidos- para el pueblo, que cuentan con la ayuda de medios de desinformacion, mas interesados en llevarnos al caos que a la solucion de los problemas patrios.
La corrupcion es un cancer que corroe el corazon de muchos.