San Salvador, 18 may (EFE).- El relator especial de las Naciones Unidas sobre agua y saneamiento, Léo Heller, aseguró hoy que las pandillas son un factor que agudiza el problema del acceso al líquido vital en El Salvador.
Heller señaló que los efectos de la presencia de los pandilleros en las comunidades se centran en el bloqueo del cobro de servicio por parte del ente estatal responsable y la falta de mantenimiento de los sistemas de distribución, según información que recabó.
«Cuando hay áreas con fuerte influencia de pandillas, el propio prestador de servicios tiene dificultades para entregar las facturas, dar mantenimiento a los sistemas y reparar problemas» en los mismos, respondió a Efe.
El experto visita El Salvador desde el 11 de mayo y se ha reunido con representantes del Gobierno, Congreso, organizaciones no gubernamentales y pobladores de comunidades para realizar un informe que se presentará en septiembre al Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Detalló que «el problema de la relación entre inseguridad y agua (…) es muy nuevo para mí» y que El Salvador «es el primer país (que visita) en el que el problema de la seguridad es muy fuerte» en relación con el acceso al líquido.
Por otra parte, relató que «tenía la intención de visitar una región en el Área Metropolitana (centro de El Salvador) pero no me aconsejaron (ir) por cuestiones de seguridad».
Heller exhortó hoy mismo al Gobierno a priorizar las políticas que permitan un mayor acceso al agua a los sectores marginados, especialmente en el área rural.
«El Salvador precisa mirar con mucha atención el acceso a agua y saneamiento de las poblaciones más desfavorecidas» porque «esto es central cuando evaluamos el acceso bajo la perspectiva de los derechos humanos, no interesa mucho verificar las brechas entre los grupos poblacionales», señaló en conferencia de prensa.
Un estudio de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH) dado a conocer recientemente concluye que la vida en El Salvador será inviable en 80 años por la crisis hídrica que se ve agudizada por el cambio climático. EFE