São Paulo (Brasil), 19 may (Sputnik). – El expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, en una entrevista exclusiva con la cadena rusa RT, caracterizó como «día de indignación» la suspensión de la mandataria brasileña, Dilma Rousseff, de su cargo.
«Fue un día de indignación para mí, un día en el que me sentí mal», dijo.
Lula indicó que «si hubiera dependido de mí, espontáneamente, no habría ido allí».
Destacó que fue «por solidaridad con la presidenta Dilma, para no dejarla sola en ese momento difícil».
Continuó, que había ido allí, «para mostrar a los detractores que quedan muchas cosas por ocurrir en este país, hay mucha lucha y aún faltan muchas conquistas para el pueblo brasileño, lograr la base para una vida digna y decente, como ya se hizo en muchos países del mundo».
La semana pasada, el Senado brasileño aprobó por 55 votos contra 22 la apertura de un juicio político contra la presidenta Dilma Rousseff, acusada de maquillar las cuentas públicas.
La mandataria queda suspendida por un plazo máximo de 180 días, periodo en que la reemplaza el actual vicepresidente Michel Temer, líder del Partido del Movimiento Democrático Brasileño.
Lula no será candidato presidencial en 2018
Durante la entrevista con RT, Lula da Silva anunció que no quiere participar en las elecciones presidenciales del 2018.
«A mí, en lo personal, sinceramente, no me gustaría serlo (candidato presidencial); ya he tenido mi experiencia», expresó Lula.
Al mismo tiempo, no descartó su eventual candidatura, resaltando que esta decisión depende del Partido de los Trabajadores (PT).
«No soy el dueño de mis decisiones; pertenezco a un partido político, a un grupo que abarca partidos, sindicatos y sociedad civil, y este grupo decide lo que va a hacer», explicó el político, quien estuvo al frente de Brasil entre 2003 y 2011. (Sputnik)
