Por Iñaki Dufour, Milán (Italia), 29 may (EFE).- El Atlético de Madrid prolongó la frustración de su única asignatura pendiente, el título de la Copa de Europa, el más difícil de la historia para un equipo, porque ya encadena tres finales sin lograr la gloria y porque nadie ha necesitado tantas para estrenar su palmarés en el máximo torneo.
Ni el Real Madrid ni el Benfica ni el Inter de Milán ni el Celtic ni el Manchester United ni el Feyenoord ni el Bayern Múnich, precisamente contra el Atlético en 1974, ni el Liverpool, ni el Nottingham Forest ni el Aston Villa ni el Steaua Bucarest ni el Porto ni el PSV ni el Estrella Roja ni el Borussia Dortmund, que fueron campeones de esta competición en su primera final.
Ni el Milán ni el Ajax ni el Hamburgo ni el Marsella ni el Chelsea, que lo hicieron a la segunda. El equipo italiano perdió en 1958 y la ganó en 1963; el holandés cayó en 1969 y se rehizo en 1971; el bloque alemán cedió en 1980 y fue campeón en 1983; el Marsella fue perdedor en 1991 y ganador en 1993; y el Chelsea fue doblegado en 2008, pero cuatro años después (2012) logró el éxito.
Ni tampoco la Juventus ni el Barcelona, que primero sintieron dos decepciones antes de ser campeones de Europa. El equipo italiano lo consiguió en 1985 -había perdido en 1973 y 1983-; el azulgrana, ya con cinco títulos de la competición, cayó primero en 1961 y 1986 antes de dominar el fútbol continental en 1992 ante el Sampdoria.
A la tercera fue la vencida para ellos, pero no para el Atlético, derrotado en sus tres finales. De Bruselas, en 1974, con el único partido de desempate de la historia del torneo, frente al Bayern, a Lisboa en 2014, en la prórroga ante el Real Madrid, cuando tenía ganada la final, y después a Milán, en la tanda de penales.
«Del segundo no se acuerda nadie. Perder dos finales es un fracaso y hay que aceptar el momento curándote las heridas en casa», dijo el entrenador argentino Diego Simeone, dolido por la derrota. «Para el Atlético de Madrid es maravilloso jugar dos finales en dos años, pero yo no me quedo contento con esto», añadió después.
«Tengo un grupo de futbolistas seguramente muy fuertes y les comentaba en el campo: no lloren, porque cuando uno da todo, hace un esfuerzo enorme para llegar a esta instancia, el fútbol también es destino y está claro que no estaba destinado para nosotros», agregó. Ni en Milán. Ni en 2014 en Lisboa. Ni en 1974 en Bruselas.
Hay equipos que han perdido más finales que el Atlético, pero también fueron campeones antes al menos una vez. La Juventus ha caído en seis ocasiones; el Bayern y el Benfica en cinco; el Milán, en cuatro; el Barcelona y el Real Madrid en tres, como el equipo rojiblanco, que aún busca la fórmula para ganar la Copa de Europa más difícil. Nadie necesitó más de tres finales para conquistarla. EFE