Moscú, 1 sep (Sputnik). – El Grupo de los Veinte o G20 es un foro informal que reúne a las principales economías del mundo.
Los miembros del grupo acopian un 90% del PIB mundial y un 80% del comercio mundial.
El plan de convocar por primera vez el foro internacional conocido como Grupo de los Veinte se aprobó en Washington el 25 de septiembre de 1999 en una reunión de los ministros de Finanzas y los gobernadores de los Bancos Centrales del G7.
El G20 se concibió como una herramienta de gestión de crisis globales frente a los retos que representaron para la comunidad internacional las tormentas financieras y económicas del año 2008.
Así surgieron sus principales objetivos, que consisten en prevenir las crisis económicas y financieras, garantizar un desarrollo equilibrado de la economía mundial y someter a reformas la estructura de la gestión global, adaptándola a los imperativos del siglo XXI.
Desde que fuera adoptado el formato de reuniones de los jefes de Estado y de Gobierno del G20, las cumbres son percibidas como un mecanismo de coordinación de la política macroeconómica, la regulación de los mercados financieros y la influencia en la política económica internacional.
Actualmente, los que gozan del estatus de miembros permanentes del G20 son la Unión Europea y 19 países, entre los que se encuentran Rusia, Alemania, Arabia Saudí, Argentina, Australia, Brasil, Canadá, China, Corea del Sur, Estados Unidos, Francia, la India, Indonesia, Italia, Japón, México, Reino Unido, Sudáfrica y Turquía.
Las cumbres del foro reúnen tradicionalmente a los miembros permanentes, a representantes de los cinco países invitados y de las organizaciones internacionales, además la Unión Europea suele estar representada por los presidentes de la Comisión Europea y del Consejo Europeo.
El G20 cuenta con su formato actual desde otoño de 2008, cuando se reunió por primera vez a nivel de jefes de Estado y de Gobierno en Washington entre el 14 y el 16 de noviembre.
Hasta aquel momento el evento llevaba casi diez años celebrándose a nivel de ministros de Finanzas y gobernadores de los Bancos Centrales de los países miembros.
En la cita de 2008 participaron los líderes de los Estados miembros del G20, representantes de la ONU, del Fondo Monetario Internacional (FMI), del Banco Mundial y del Foro de Estabilidad Financiera, una reunión que fue convocada para poder encontrar una salida a la crisis económica mundial.
Los participantes aprobaron una declaración conjunta que estipulaba cinco principios de las reformas encaminadas a fortalecer los mercados financieros y a introducir regímenes de control que permitieran evitar crisis en el futuro.
La segunda cumbre del G20 se celebró el 2 de abril de 2009 en Londres, donde los líderes asistentes consiguieron acordar medidas sin precedentes, cuyo objetivo era salvar la economía global.
Tras superar serias discrepancias, los asistentes a la cumbre llegaron a una fórmula de compromiso sobre una reforma de importancia primordial del sistema financiero mundial.
Fueron formulados seis puntos cruciales: el aumento de los recursos del FMI y la asignación de fondos para la ayuda a los países más afectados por la crisis, la lucha contra los «paraísos fiscales», la regulación de los bonos que se pagan a los directivos de las empresas y los bancos, los paquetes nacionales de medidas destinadas a controlar la coyuntura económica, la introducción de un control más severo de los mercados financieros, las garantías de estabilidad de las economías nacionales.
El resultado principal fue la decisión de destinar a lo largo de los próximos 1,5 años cinco billones de dólares para la solución de los problemas económicos, una quinta parte de esta cuantía había de pasar a disposición del FMI.
Entre el 24 y el 25 de septiembre de 2009, la ciudad de Pittsburgh (EEUU) acogió la tercera cumbre del Grupo de los Veinte que tuvo como resultado la adopción del papel clave del formato del G20 para la solución de los problemas que afronta la economía global.
En el comunicado final se fijaba el acuerdo de limitar los bonos de los directivos de las empresas y de redistribuir las cuotas de los organismos financieros internacionales a favor de los países en vías de desarrollo.
Durante la reunión se tomó la decisión de adoptar el nuevo formato de forma permanente y reconocer el papel clave del foro en la solución de los problemas económicos mundiales y en el fomento de la cooperación económica internacional.
El país que asume presidencia anual, que es rotativa, hace de anfitrión de las cumbres, en 2009 la asumió Reino Unido; en 2011, Francia; en 2012, México y en 2013 lo hizo Rusia.
En el marco del foro existe el llamado ‘trío directivo’, formado por el antiguo, el actual y el próximo país presidente.
El objetivo de este trío es asegurar la continuidad, que los miembros del foro sean consecuentes al considerar los asuntos, transparentes en el cumplimiento de las decisiones adoptadas, que tienen que ser legítimas y que se alcanzan con consultas a países que no forman parte del grupo.
Los tres países presidentes realizan la primera ronda de consultas sobre las agendas de las cumbres y sobre el contenido de los documentos, antes de que sean sometidos a debates.
Actualmente el trío directivo está compuesto por Turquía, que albergó el evento internacional en 2015, China, actual anfitrión de la cumbre, y Alemania, que abrirá sus puertas al encuentro de los líderes internacionales en 2017.
Desde noviembre de 2010 los participantes de las reuniones de más alto nivel del G20 decidieron reunirse no más de una vez por año.
Rusia participó en todas las cumbres del grupo y acogió en 2013 en San Petersburgo el foro internacional de los países más desarrollados.
La próxima cumbre del G20 se celebrará el 4 y el 5 de septiembre de 2016 en la ciudad china de Hangzhou.
Su agenda se centrará no solo en las medidas que permitan impulsar el desarrollo sostenible de la economía a nivel mundial, sino además en hacer frente a los desafíos actuales, tales como el terrorismo internacional, la crisis de refugiados y la financiación de movimientos extremistas. (Sputnik)