San José, 16 Dic (Elpaís.cr) – A la consecución del título 33 por parte del Deportivo Saprissa no le faltó la polémica. Hubo dos claros penales reclamados por el Club Sport Herediano en el primer tiempo que no fueron sancionados por el árbitro Walter Quesada, lo que provocó el estallido en furia de los florenses.
Infortunadamente la coronación del nuevo monarca del fútbol nacional quedó empañada por el pésimo arbitraje del experimentado Quesada en la «Cueva».
Aunque los tibaseños se adelantaron en buena ley en el marcador, apenas a los 7 minutos, llegando casi a la media hora de juego se dio la primera de las dos acciones que perjudicaron a los rojiamarillos.
Al 30′ el defensa Roy Miller intentó despejar la pelota en su área pero terminó impactando la pierna del herediano Yendrick Ruiz. Una clara infracción que no fue señalada como penal por Quesada pese a los reclamos del conjunto visitante.
Antes del cierre de la primera etapa de nuevo sería protagonista Quesada, tras no pitar otro penal por una mano de Francisco Calvo luego de un remate de Ruiz.
Los reclamos esta vez fueron más airados e incluso, en el entretiempo la situación se tornó muy tensa en los camerinos por la evidente molestia del Herediano.
En la segunda etapa no ocurrieron más situaciones polémicas, los rojiamarillos no fueron capaces de torcer la historia y el Saprissa liquidó el partido y amarró el cetro nacional con un golazo de Marvin Angulo.