Moscú, 27 dic (Sputnik). – El diálogo entre Moscú y Washington se vio complicado en 2016 ante todo por la agresiva política de contención de Rusia, la imposición de sanciones, el despliegue del escudo antimisiles estadounidense y la actividad militar provocadora de EEUU en las fronteras occidentales de Rusia.
Así lo indica un comunicado que publicó este martes el Ministerio de Exteriores de Rusia y en el que hace balance de la política exterior del país y expone las causas que dificultaron el diálogo con Washington en 2016.
Según destaca la Cancillería rusa, Moscú emprendió en 2016 numerosos intentos de convencer a Washington de la necesidad de normalizar el diálogo en pie de igualdad y respeto mutuo.
«Moscú llamó insistentemente a arreglar los problemas que afectan las relaciones bilaterales desde hace años, como el secuestro de ciudadanos rusos por los servicios secretos de EEUU en terceros países y la violación de los derechos de los niños rusos adoptados por familias estadounidenses», dice la nota.
La Cancillería rusa, además, responsabiliza a Washington de alimentar los sentimientos rusófobos al haber acusado a Moscú de intervenir en la campaña electoral de EEUU.
Numerosos medios estadounidenses llegaron a afirmar que piratas informáticos rusos se habían inmiscuido en la campaña electoral para favorecer al republicano Donald Trump, pero sin aportar prueba alguna.
No obstante, indica el Ministerio de Exteriores ruso, los dos países siguen cooperando en varias áreas lo que responde a los intereses de Moscú y redunda en bien de la seguridad internacional.
«Se trata, por ejemplo, de la cooperación en el arreglo de la crisis siria y del tratado de desarme nuclear de 2010 (START III), así como de una decena de otros acuerdos bilaterales», subraya el comunicado.
La Cancillería rusa constata el fracaso total de la política de aislamiento de Rusia en el ámbito internacional.
«Se celebraron dos reuniones de los presidentes y 14 reuniones de los responsables de la política exterior, incluidas dos visitas del secretario de Estado de EEUU a Moscú», precisó el Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia en su balance del año 2016 . (Sputnik)