Bogotá, 11 abr (Sputnik).- Todas las armas de la guerrilla más longeva del continente americano, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), están identificadas y registradas como parte esencial del proceso de paz, anunció el lunes la Misión de la ONU en este país.
«Informamos que el Componente Internacional del Mecanismo de Monitoreo y Verificación culminó los procedimientos de registro e identificación del armamento en los campamentos», dice un comunicado firmado por ese mecanismo tripartito conformado por la Misión de la ONU, el Gobierno de Colombia y las propias FARC.
En virtud del acuerdo de paz firmado por el Gobierno y las FARC el 24 de noviembre, corresponde a la ONU, Componente Internacional del mecanismo, realizar el «procedimiento técnico» para establecer las características de las armas individuales de los miembros de la guerrilla en trance de desarme y desmovilización.
El registro del armamento es entendido como “el procedimiento técnico” que determina “la calidad y el tipo de arma”. La identificación consiste en establecer “las características de las armas individuales”.
A partir de ahora, la misión de la ONU conformada por personal uniformado y civil de 19 países, está en condiciones de iniciar la recolección del armamento, guardado en caletas en puntos distribuidos por casi todo el territorio de este país andino y amazónico.
Los países que han aportado observadores a la misión son Argentina, Bolivia, Canadá, Chile, Cuba, Costa Rica, República Dominicana, España, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Noruega, Paraguay, Portugal, Reino Unido, Rusia, Suecia y Uruguay.
Hay 6.804 guerrilleros de las FARC concentrados en campamentos en zonas veredales y puntos transitorios de normalización, a los que se suma un primer contingente de más de 1.500 milicianos (miembros de apoyo de la insurgencia), señala el quinto informe mensual presentado por el Mecanismo Tripartito y distribuido a la prensa.
Pero casi todos esos campamentos se encuentran todavía en construcción de las áreas comunes, que comprenden desde instalaciones de salud y saneamiento, hasta energía, logística y almacén, mientras no ha comenzado todavía la fase de erigir los alojamientos propiamente dichos.
La guerrilla izquierdista de las FARC se alzó en armas en 1962, a partir de un puñado de campesinos del Partido Liberal y comunistas, y vivió sucesivas olas de expansión y repliegue, aunque siempre mantuvo presencia en las regiones más recónditas y alejadas del Estado.
Aunque participó en varias negociaciones con diferentes gobiernos para alcanzar la paz, nunca había llegado tan lejos como hasta ahora. (Sputnik)