Según un informe preliminar recogido por el canal CNN Philippines, las fuerzas gubernamentales se implicaron esta mañana en un intercambio de disparos con los presuntos miembros del Nuevo Ejército Popular (NPA, por sus siglas en inglés) en la ciudad de Calbiga y las víctimas fueron resultado de un artefacto explosivo detonado por los guerrilleros.
El NPA es el brazo armado del Partido Comunista de Filipinas (CPP), grupo que abraza la ideología maoísta y es designado terrorista por el Gobierno.
Cinco décadas del conflicto entre las fuerzas gubernamentales y la guerrilla del CPP-NPA en Filipinas han costado la vida a más de 40.000 personas.
El enfrentamiento tuvo lugar una semana después de que el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, lanzara un nuevo llamado al NPA para que renuncie a las armas, como condición para el relanzamiento de las conversaciones que el Gobierno suspendió en noviembre de 2017 con el Frente Democrático Nacional (NDF), la organización que representa a los rebeldes. (Sputnik)