«Un grupo de ciudadanos cubanos albergados en la estación migratoria Siglo XXI de Tapachula, Chiapas, promovieron una salida no autorizada de las instalaciones», dijo el martes de noche el INM en un comunicado.
Hubo un corte de energía eléctrica y «aprovechando la falta de iluminación, alrededor de 100 personas se movilizaron para salir de las instalaciones», añadió.
Los migrantes para poder movilizarse en México deben recibir tarjetas de visitantes temporales, visas humanitarias o permisos de trabajo y los indocumentados tienen que esperar en la estación hasta tanto se las otorguen.
Desde hace varias semanas esa estación migratoria de Tapachula no ofrece los documentos por varios motivos como la caída del sistema electrónico.
Esta es la cuarta vez que los migrantes abandonan en masa esa estación en menos de dos semanas, desde la primera registrada el pasado 25 de abril, la mayoría eran cubanos.
Las autoridades migratorias informaron que investigan las particularidades del evento y «las condiciones que permitieron la interrupción del servicio eléctrico que favoreció la irrupción».
EL INM dijo que sus agentes, que no están armados por norma, «actúan con responsabilidad evitando la confrontación».
En la incertidumbre de la oscuridad «personal del INM resultó lesionado, pero no de gravedad».
Reportes de medios locales en el fronterizo estado de Chiapas indican que a causa de una fuerte lluvia la zona de Tapachula, a 40 kilómetros de la línea fronteriza sur, quedó sin energía eléctrica.
Durante el apagón los migrantes fueron trasladados a la explanada exterior del edificio que funciona como un recinto ferial adaptado como albergue, momento que fue aprovechado para abandonar la estación.
Un operativo de búsqueda comenzó alrededor de la medianoche del martes por agentes de la policía federales y del estado de Chiapas.
El albergue temporal está en las instalaciones de la Expo Feria Tapachula, localiza a unos 40 kilómetros de la línea fronteriza con Guatemala, con capacidad para albergar a 1.500 personas
El refugio temporal es un espacio abierto con jardines en 6.000 metros cuadrados techados.
Unas 300.000 personas indocumentadas han ingresado a territorio mexicano en los primeros meses del año, según autoridades mexicanas, que ofrecen visas de trabajo en el sureste del país para desincentivar la marcha hacia EEUU.
El Gobierno de México exige el registro de los indocumentados como precondición para garantizar el respeto a sus derechos humanos y protegerlos de los traficantes de personas. (Sputnik)