Río de Janeiro (Brasil), 23 jul (Spuntik).- El presidente Jair Bolsonaro aseguró este martes que «ama» el noreste de Brasil, luego de la polémica desatada la semana pasada por comentarios suyos en una conversación privada que fueron calificados de racistas por gobernadores de esa región del país, informaron medios locales.
«Yo amo el noreste (…) no estoy en Vitória da Conquista, no estoy en Bahía, ni en el Noreste, estoy en Brasil; no hay división entre nosotros, somos un solo pueblo con un solo objetivo: poner a este país en el lugar destacado que merece», según declaraciones recogidas por el diario O Globo.
El presidente hizo estas declaraciones al inaugurar el nuevo aeropuerto de Vitória da Conquista, en el interior del estado de Bahía, situado en la región noreste de país.
La semana pasada, en una conversación informal con el jefe de gabinete Onyx Lorenzoni, el presidente afirmó: «de aquellos gobernadores de «paraíba» el peor es el de Maranhão».
El término «paraíba» es usado por algunas personas en Río de Janeiro para definir de forma despectiva a los habitantes del noreste del país, la región históricamente más pobre y donde la izquierda cosecha los mejores resultados.
Las palabras de Bolsonaro provocaron la indignación de los gobernadores del noreste, en su mayoría de partidos opositores al Gobierno.
El gobernador del estado de Maranhão, Flávio Dino (del Partido Comunista de Brasil), aseguró que se está planteando presentar ante la Procuradoría General de la República una denuncia contra el presidente por racismo.
En su primera visita a la región tras la polémica, Bolsonaro fue boicoteado por el gobernador de Bahía, Rui Costa, que no acudió a la inauguración del aeropuerto y se negó a ceder efectivos de la Policía Militar para proteger la comitiva del presidente.
Este gobernador, del Partido de los Trabajadores (PT), alegó que no podía poner a la policía contra el pueblo que quisiera ir a ver el nuevo aeropuerto, criticando que la comitiva presidencial se aislara y rodeara la terminal aérea con muros para prevenirse de posibles protestas. (Sputnik)