Monroy no hizo referencia en su escueto balance a la complicada situación en el hospital de Villa Nueva, el primero en atender la enfermedad, donde un grupo de médicos exigieron este lunes al Ministerio resolver en 48 horas el actual déficit de personal, incluidos paramédicos y técnicos, pues se encuentra al límite de sus capacidades.
El grupo de profesionales que salió hasta la puerta del centro para presentar sus demandas no confirmó a la prensa cuántas plazas se necesitarían ni respondió preguntas, pero sus reclamos coinciden con un informe de la Procuraduría de los Derechos Humanos a raíz de varias denuncias.
De acuerdo con el documento elaborado tras una inspección la víspera, solo tres médicos están atendiendo a 90 pacientes, no se encontró autoridad administrativa durante la inspección y varios galenos y enfermeras están en cuarentena, al dar positivos a la Covid-19.
Entre los hallazgos confirmaron que pacientes con complicaciones renales no han recibido hemodiálisis porque la empresa contratada para ese servicio dejó de atender por falta de pago.
En una citación hoy en el Congreso, Monroy aceptó que hay deficiencias con el personal de ese centro hospitalario, pero atribuyó el hecho a la burocracia para las contrataciones.
Para contratar personal necesitamos informes de la Oficina Nacional del Servicio Civil, con Finanzas y otros; si por nosotros fuera solo que presentaran su diploma de graduado y colegiado activo, y a comenzar a trabajar, manifestó al ser interrogado sobre el peliagudo tema.
Guatemala atraviesa la etapa más crítica de la enfermedad con una curva en ascenso desde la semana anterior, lo cual llevó al presidente, Alejandro Giammattei, a prohibir a partir de hoy la libre locomoción, circulación y tránsito entre departamentos.
También mantuvo el toque de queda por 10 horas por tercera semana consecutiva y el uso obligatorio de mascarillas en la vía pública como medidas preventivas para enfrentar la actual fase de mitigación con varios brotes comunitarios en curso.