Haití comenzó la desescalada gradual el pasado 30 de junio, y hasta el 1 de julio reportaba solo 57 casos importados.
Hasta el momento,, la cartera sanitaria no ofreció declaraciones sobre este aumento, aunque su titular, Marie Greta Roy Clement, defendió recientemente la reanudación de vuelos con Estados Unidos, en especial con la Florida que acoge a una amplia diáspora haitiana.
Además de los vuelos, y la apertura de fronteras terrestres, el gobierno anunció la reanudación de los servicios religiosos y clases el 12 de julio y 10 de agosto, respectivamente, mientras desde mañana las fábricas operarán con normalidad.
El ejecutivo también redujo a cuatro horas el toque de queda nocturno, aunque mantiene el uso de mascarillas en lugares público y sugiere evitar aglomeraciones.
A finales de junio, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) de las Naciones Unidas en Haití alertó que en medio de la lucha contra la Covid-19, otros indicadores de salud muestran cifras ‘alarmantes’.
Entre marzo y junio pasado se triplicaron los casos de paludismo confirmados, con respecto a igual periodo del año anterior, mientras que entre mayo de 2019 y mayo de 2020 se observó una disminución del 74 por ciento en los partos hospitalarios y del 67 por ciento de las consultas prenatales, indicó la organización.
La OCHA expresó su preocupación por la interrupción de servicios de salud regulares por causa de la pandemia y la negativa de varios centros de sanitarios de atender pacientes por no contar con los medios de protección.