El relator del caso es el magistrado Félix Fischer, pero le correspondió a Noronha analizar el asunto porque, según el reglamento interno del tribunal, el titular de la corte es responsable de decidir sobre cuestiones urgentes en receso.
Los pedidos de libertad del expolicía Queiroz y su cónyuge llegaron al STJ el 7 de julio, después que el Tribunal de Justicia de Río de Janeiro decidiera enviar el caso al juzgado superior.
En su solicitud de libertad, la defensa utilizó como argumento la ‘etapa actual de la pandemia de coronavirus’. Alegó además que su defendido ‘tiene cáncer de colon y se ha sometido recientemente a una cirugía de próstata’.
Queiroz fue detenido el 18 de junio en Atibaia (interior del estado de Sao Paulo) en la residencia del abogado Frederick Wasseff, quien actuaba como defensor de Flávio Bolsonaro.
Bautizada Anjo (Ángel), la operación está relacionada con la investigación sobre el supuesto esquema de desvío de dinero público que el senador Bolsonaro habría montado durante su tiempo como diputado en la Asamblea Legislativa de Río (Alerj), de 2003 a 2019.
El caso salió a la luz a finales de 2018, después de que el organismo de control de movimientos financieros (COAF) descubriera giros atípicos entre 2016 y 2017 en una cuenta de Queiroz, por un valor de unos 375 mil dólares.
La Fiscalía procura aclarar si el entonces diputado Flávio Bolsonaro contrataba a amigos o familiares como asesores para después exigirles que depositaran en sus cuentas parte del salario, práctica conocida en Brasil como rachadinha.
Entre los consejeros del descendiente del jefe de Estado aparecen una fisicoculturista y un veterinario, que vivían en ciudades distantes de Río, lo cual aumentó las sospechas de fraude.
La víspera, el congresista testificó ante la Fiscalía de Río por la llamada rachadinha. El contenido de la audiencia es secreto y no será revelado. Está bajo la más estricta confidencialidad.