El diálogo dará respuesta a trabajadores de varias partes del país cuyas economías dependen del comercio a través de la frontera, paralizado desde marzo, cuando fueron reportados en Bolivia los primeros casos positivos a la Covid-19.
Datos anteriores al golpe de Estado contra el presidente Evo Morales dan cuenta de que Argentina figura entre los principales socios comerciales de Bolivia como uno de los destinos más importantes de sus exportaciones y punto de origen de grandes volúmenes de importaciones.
En materia de intercambio, Buenos Aires era el cuarto proveedor de bienes a La Paz, acaparando el 11 por ciento de las importaciones bolivianas e interese en todos los sectores de la economía del país andino-amazónico.