En conferencia de prensa, autoridades de los 48 cantones aseguraron que los diputados no legislan para las clases necesitadas y del pueblo de Guatemala, sino a favor de la impunidad y la corrupción, por eso el llamado a esta nueva jornada de rechazo popular.
‘Todos hemos sido testigos de los últimos acontecimientos ocurridos en las manifestaciones, el repudio y rechazo de como este gobierno no ha respondido al bien común, especialmente al atropelló el pasado 21 de noviembre que sufrieron ciudadanos al reclamar sus derechos quiénes fueron reprimidos por la Policía Nacional civil’, explicaron, al argumentar los motivos de este plantón.
‘Hay complicidad entre el Legislativo, Ejecutivo y poder Judicial favoreciendo a la impunidad y la corrupción, situación que en estos momentos tiene cansado al pueblo de Guatemala’, puntualizaron en un comunicado de prensa.
Además, pedirán que la fiscal general Consuelo Porras presente resultados de la investigación contra altos funcionarios del Ministerio de Gobernación y de la Policía Nacional Civil por la represión desmedida contra manifestantes en la Plaza de la Constitución, el sábado 21.
Este miércoles participarán solo las corporaciones y juntas directivas de las comunidades para evitar riesgos de contagio de la Covid-19, aunque quedó abierta la posibilidad de que más personas se sumaran a la manifestación bajo la observancia de las medidas sanitarias.
‘A todo el pueblo de Totonicapán del área urbana y rural se solicita su apoyo y respaldo a esta lucha en el sentido de no abrir sus negocios de toda clase durante ese día de la manifestación’, solicitaba la convocatoria.
Desde el 21 de noviembre, la Plaza de la Constitución es protagonista cada sábado de protestas pacíficas para exigir la renuncia de Giammattei y su equipo de gobierno, a pesar de que este accedió recientemente a cumplir varias de las demandas de la población, entre ellas, la readecuación del presupuesto para el próximo año.
La semana pasada, hubo otro día de bloqueos carreteros por parte de la alcaldía indígena de Sololá, con similares reclamos, y la advertencia de movilizar a sus comunidades hacia esta capital si sus peticiones no eran oídas.