Moscú, 15 dic. (Sputnik).- Rusia aún no ha recibido ninguna respuesta del Departamento de Estado de Estados Unidos a la denuncia por los ataques contra periodistas rusos ocurridos en el país norteamericano en julio, declaró este martes el representante permanente de Rusia ante la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), Alexandr Lukashévich.
«Llamamos la atención el 28 de octubre sobre el ataque contra los corresponsales del equipo de filmación del Canal 1 ruso en Filadelfia (…) La policía se mantuvo prácticamente al margen», dijo el funcionario en declaraciones transmitidas por la cadena de televisión Rossiya 24.
Lukashévich precisó que los corresponsales estaban filmando un material casi en el centro de la ciudad cuando se vieron rodeados por una multitud de saqueadores y tuvieron que defenderse por sus propias fuerzas.
«Observamos que Rusia aún no ha recibido respuesta a los llamados oficiales al Departamento de Estado sobre ataques similares en julio de este año contra representantes de los medios de comunicación», destacó Lukashévich.
Según el diplomático, en EEUU del 1 de enero al 7 de diciembre se registraron 960 casos de agresiones contra periodistas, incluidos más de 110 arrestos, 301 ataques, entre ellos 160 protagonizados por agentes de la policía.
En julio pasado, un equipo del Canal 1 ruso que cubría las protestas en Portland sufrió un ataque de la policía.
Los corresponsales estaban grabando un intento de los manifestantes de asediar un edificio del tribunal federal donde estaban desplegados agentes de seguridad federales, enviados a la ciudad pese a las objeciones de las autoridades locales.
En ese momento un agente de la policía golpeó con una porra al cámara Viacheslav Arjípov, le arrebató su cámara y la rompió. Arjípov fue lanzado al suelo.
Su colega Yulia Oljóvskaya grababa los mismos hechos con su teléfono móvil cuando un agente de la policía la atacó por la espalda, tomó su dispositivo y le quitó el casco a la reportera, que aseguraba gritando que era periodista.
Los dos también fueron rociados con gas lacrimógeno. Tanto Arjípov como Oljóvskaya llevaban insignias de prensa. (Sputnik)