Recién el pasado viernes, luego de ocho meses de reclamos, el ministro Rolando Castro accedió a reunirse con los manifestantes y se comprometió a solicitar medidas cautelares en favor de las víctimas.
‘Desde julio queríamos dialogar con el ministro sobre nuestros problemas, sin que accediera’, confirmó Torres, quien se encuentra débil, con mareos y náuseas, a base de sueros y agua.
Tras la reunión, Castro declaró que acompañaría a las trabajadoras de Industrias Florenzi y que llevaría su caso ante las instancias nacionales e internacionales.
‘Vamos a apoyarlas con todo lo que esté a nuestro alcance’, prometió el ministro, quien llevó víveres al grupo que ocupó desde mediados de 2020 las instalaciones de Florenzi, tras su despido sin compensación.
Rafael Méndez, secretario general de la Coordinadora Sindical Salvadoreña, confirmó a Prensa Latina que representantes de la Organización Internacional del Trabajo y las Naciones Unidas se interesaron por el caso.
Los empleados de la Florenzi fueron despedidos, muchos de ellos luego de dedicarle entre 25 y 35 años a dicha maquila, sin recibir indemnización ni una pensión.