En todo caso, esa acción hostil norteamericana confirma que no cambió la política agresiva de Washington hacia el pueblo iraquí, pese a un cambio en la presidencia de Estados Unidos.
Mientras, Qais al-Jazali, jefe del grupo Asaib Ahl al-Haq, describió el ataque de acto despreciable y reflejo de que el recién instalado gobierno de Joe Biden está al servicio del régimen de Tel Aviv.
‘La salida de las tropas estadounidenses es la única forma de lograr estabilidad en Iraq’, apuntó.
Este viernes, el Pentágono bombardeó instalaciones de las fuerzas que luchan contra los terroristas en el este de Siria; el primer ataque ordenado por el presidente Joe Biden.
La Fuerza de Tarea Conjunta Combinada-Operación Resolución Inherente, una coalición internacional liderada por el Pentágono, elevó a nivel de máxima alerta para sus fuerzas en Iraq, en especial en la base aérea de Balad ante el temor de una respuesta de la Resistencia iraquí.