Moscú, 21 ago (Sputnik).- Más de cuatro millones de personas corren el riesgo de quedarse sin acceso al agua potable en el Líbano en los próximos días, alertó el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
«A menos que se tomen medidas urgentes, más de cuatro millones de personas en todo el Líbano, en su mayoría niños y familias vulnerables, se enfrentan a una grave escasez de agua o a que se les cortará por completo el suministro de agua potable en los próximos días», advirtió el organismo.
Recordó que el mes pasado el organismo ya había advertido de que más del 70 por ciento de la población podría quedarse sin acceso a agua salubre en medio del grave deterioro de la crisis económica.
Desde entonces la situación no ha cambiado, constata.
«Instalaciones vitales como hospitales y centros de salud no han tenido acceso al agua potable debido a la escasez de electricidad, lo que ha puesto vidas en riesgo», alertó.
Si cuatro millones de personas se ven obligadas a recurrir a fuentes de agua costosas e inseguras, dice, el Líbano podría ver «un aumento de las enfermedades transmitidas por el agua, además del aumento de los casos de covid-19».
Con este respecto Unicef pidió restaurar de manera urgente el suministro de energía que es «la única solución para mantener los servicios de agua en funcionamiento».
La organización instó a la pronta formación de un nuevo Gobierno que es fundamental para resolver la crisis, proteger la vida de los niños y garantizar el acceso al agua y a todos los servicios básicos.
El Líbano vive desde otoño de 2019 una profunda crisis económica y política.
Desde entonces hubo varias dimisiones del Gobierno, incluido el de Saad Hariri, que en octubre de 2020 volvió a ser designado como primer ministro, pero no logró formar el nuevo Ejecutivo, debido a las discrepancias con el presidente libanés, Michel Aoun, y al final renunció a su cargo el pasado 15 de julio.
Debido al agravamiento de la crisis política y económica, más del 50 por ciento de la población del Líbano se vio por debajo del umbral de la pobreza. Según datos de la ONU, más del 75 por ciento de los niños libaneses se subalimentan. Los precios de los víveres crecieron más del 400 por ciento en un año y medio.
Desde octubre de 2019 se encuentra paralizado todo el sistema bancario, se congelaron todos los depósitos de los ciudadanos en divisas extranjeras, y se prohibió la transferencia de ese dinero al exterior. También se declararon en quiebra muchas empresas pequeñas y medianas.
La pandemia del covid-19 agravó aún más la situación en el Líbano. (Sputnik)
Unicef advierte que millones de personas pueden quedarse sin agua en el Líbano
