Rodrigo Madrigal…la alegría de vivir… la voluntad de no ceder…el mundo como ocasión para comprender, festejar, elucidar y compartir…Rodrigo, el intelectual… el maestro de la pluma-bisturí, nunca estéril, condescendiente o lisonjera…Rodrigo el educador…analítico…comprometido…promotor de instituciones y juventudes…Rodrigo el melómano, fascinado por los inefables arrebatos de Schubert, Mendelssohn y Chopin…
Rodrigo, el amigo…tolerante… solidario…oportuno…discreto…Rodrigo, en fin, humano.. múltiple…complejo y contradictorio …una bella totalidad…caleidoscópica compañía que nos cobijó por decenios…inspiración que perdurará ahora que al alejarse está más cerca…no decimos adiós a lo que llevamos dentro !
Ronald Fernández