¿Cuál es la mejor manera de saludar?
Probablemente el arte de saludar sea uno de los actos de comunicación más importantes en nuestro día a día. Saludamos en la calle, en casa, en la cafetería, en un pleno, en un discurso político, en cientos de escenarios públicos.
En la política presencial y online estamos constantemente saludando, conectando y comunicando sensaciones y emociones. Cuando la raza humana apareció, antes de evolucionar con el lenguaje y la comunicación verbal, el hombre se comunicó de la única manera que sabía hacerlo, por gestos y la comunicación no verbal. De hecho, seguimos haciéndolo hoy en día. Los animales siguen acogiéndose a la comunicación no verbal, los sonidos y otras herramientas para poder relacionarse, los seres humanos también, aunque no somos conscientes de hacerlo.
El saludo sin hablar dice más de lo que imaginamos. ¿Recuerdas cómo nos llevamos la mano al corazón cuando queremos demostrar afecto? ¿Quién nos enseñó ese gesto?
La importancia del saludo
Cuantas veces te habrá pasado que te presentan a alguien desconocido y a la hora de saludar te invade la duda de ofrecer la mano o acercar la mejilla para dar dos besos. No te asustes, nos pasa a todos y dudar en este tipo de encuentros es muy frecuente. En cualquier caso, la presentación tiene algunas conductas de comportamiento y reglas de protocolo para que salgas airoso o airosa de esos momentos de duda.
El saludo es un generador de energía, implica ante todo hacer notar nuestra predisposición y presencia ante otras personas, en realidad es un acto instintivo, una gran oportunidad para dar una buena impresión con tu marca personal. También al despedirnos saludamos, por lo que es muy importante tener en cuenta esos dos momentos, el encuentro y la despedida.
En España dar dos besos en la mejilla para ofrecer nuestro saludo es habitual, incluso cuando no conocemos a la otra persona, de manera especial a familiares cuando llevamos tiempo sin encontrarnos con ellos. Este tipo de saludo se entiende como una muestra de cariño, un saludo muy extendido también en Europa y Latinoamérica. El protocolo en otros países como Alemania y Reino Unido varía, dejando este acto solo para situaciones familiares. Algunas regiones de Holanda y Francia optan por ofrecer tres besos.
Curiosamente en Rusia el número de besos puede llegar a ascender hasta la cifra de seis.
Lo que debería ser algo sencillo, nos resulta complicado ¿verdad? Diferentes culturas, diferentes momentos, diferentes contextos políticos. Pero lo cierto es que en la vida pública, cotidiana y social tenemos la obligación de presentarnos y saludar casi constantemente. En Italia primero se besa la mejilla izquierda y luego la derecha.
Como saludar a tu audiencia
Hola, ¿qué tal?, ¿qué tal estás?, buenos días, buenas tardes, hasta pronto, gracias por su interés y así un sinfín de combinaciones en palabras usamos para saludar, seguro que tú tienes algunas más en tu vocabulario. No siempre acompaña la palabra en el saludo, no es imprescindible para comunicar nuestro mensaje. La imagen que se ofrece muchas veces en las fotografía, más allá del valor político que pueda tener desde un punto de vista comunicativo, refleja claramente la cortesía o empatía de los líderes o gobernantes políticos. El saludo, sin duda, es uno de los gestos más representativos en la comunicación no verbal, considerándose en la actualidad un gesto de equilibrio que viene a indicar el inicio de interacción entre dos o más personas.
Entonces ¿estrechamos la mano o damos dos besos? Veamos…
Si el encuentro se de entre dos hombres, es fácil, un apretón de manos será suficiente, eso sí, estrechar la mano de manera firme y con determinación, ni muy corto ni agitar de manera tanto tiempo que aburramos a la otra persona. Al mismo tiempo ofrecer una mano fuerte, pero sin exceso. Un saludo en el que se mueva la mano ligeramente, intentando ofrecerla dos o tres pasos antes de acercarnos. ¡Ah! y nunca saludar con la mano en los bolsillos.
Cuando saludes, mira siempre a los ojos y sonríe, ahí está la clave de un buen saludo.
Si se da la circunstancia de hombres que usan sombrero o guantes, se recomienda quitarlos siempre justo antes de saludar, en el caso de las mujeres es permisible seguir llevándolos puestos. Ahora bien, si el saludo se da entre una mujer y un hombre o entre dos mujeres, las reglas pueden cambiar un poco. Si es la primera vez que un hombre y una mujer se encuentran, el beso no debe utilizarse, a medida que la relación es más continuada, entonces, besar es más aceptado. En este último caso debería ser la mujer quien tome la iniciativa. Cuando el encuentro sea entre dos mujeres ¿cómo se actúa? La mujer de mayor edad o de mayor cargo o estatus es la que tiene que ofrecer el beso.
Como saludar correctamente
En la psicología política se analizan los gestos, las emociones, las corrientes de opinión, la apariencia del candidato y temas como el impacto de marca política en el electorado. Por eso saludar es un acto demasiado importante como para no tenerlo interiorizado y preparado, es un acto de respeto y de buena educación, es la antesala para tener buenas relaciones a posteriori y por eso requiere de preparación y entrenamiento.
Saludar intentando tocar y que se note la palma de la mano con la de la otra persona, al mismo tiempo que tocarle el codo, aumenta las sensaciones positivas que se perciben. Si la marca personal es aquello que dicen de nosotros cuando no estamos presentes, imagínate lo que dirán si te olvidas de saludar. También tenemos el abrazo, reservado para aquellas relaciones de confianza. ¿Sabías que los abrazos son un buen medicamento natural contra el estrés, son liberadores de oxitocina, la hormona que rebaja el dolor? Al mismo tiempo liberan dopamina, neurotransmisores para sentirnos bien, mejorando la memoria y el sueño.
En múltiples experimentos se ha descubierto que un abrazo de veinte segundos activa la oxitocina equivaliendo a un mes de terapia. De todas formas, la Facultad de Psicología de la Universidad de Dundee en Escocia, ha concluido un estudio donde demuestra que los abrazos de media tienen una duración de tres segundos. No siempre tenemos la oportunidad de acercarnos a la otra persona, o simplemente hemos grabado un vídeo para lanzar un argumentario o mensaje político en las redes sociales o en una entrevista que se va a emitir por televisión, por lo que, en esas circunstancias, mirar al frente y sonreír es de vital importancia.
¿Qué impresión nos deja alguien que no saluda? Mala, una muy mala impresión, tomándose normalmente a la persona que no saluda como alguien distante, de poca educación y poca sociabilidad.
Te la juegas mucho en el saludo, al inicio y al final.
(*) Isaac Manuel Hernández Álvarez, Asesor de comunicación política