Moscú, 4 ene (Sputnik).- Las tropas rusas destruyeron un lanzador del sistema de cohetes de lanzamiento múltiple (Himars), desde el cual el ejército de Kiev atacó a Makéyevka, en la República Popular de Donetsk (RPD), el 1 de enero, informó el teniente general Serguéi Sevriukov, primer subjefe de la Dirección Principal Político-Militar de las Fuerzas Armadas rusas.
«El lanzador del sistema de cohetes de lanzamiento múltiple, desde el cual las Fuerzas Armadas de Ucrania dispararon contra Makéyevka, fue destruido por el fuego de respuesta. Además, como resultado de los ataques con cohetes y aéreos contra la acumulación de equipo militar en el área de la Estación de tren Druzhkovka, de la República Popular de Donetsk, se destruyeron cuatro lanzadores más de sistemas de cohetes de lanzamiento múltiple Himars, cuatro vehículos de combate RM-70 Vampire MLRS, más de 800 cohetes para ellos, ocho vehículos, así como más de 200 nacionalistas ucranianos y mercenarios extranjeros», afirmó.
También se informó que la cantidad de militares rusos fallecidos en el ataque contra Makéyevka ascendió a 89 efectivos.
Inicialmente, el Ministerio de Defensa ruso comentó que habían muerto 63 soldados por causa de un ataque ucraniano contra un punto de despliegue temporal de una unidad de las tropas rusas en la ciudad de Makéyevka.
«Por desgracia, a medida que se retiraban los escombros de las estructuras de hormigón armado, el número de nuestros camaradas muertos aumentó a 89», declaró el general teniente.
La razón principal detrás de la muerte de los rusos en Makéyevka fue el uso masivo de teléfonos móviles por parte del personal militar, rastreado por las tropas ucranianas, explicó Sevriukov.
«Actualmente, una comisión está trabajando para investigar las circunstancias del incidente. Sin embargo, ya está claro que la causa principal del incidente fue el uso masivo de teléfonos celulares por parte del personal en el rango de acceso de armas enemigas, a pesar de la prohibición», dijo. Y agregó que el enemigo logró rastrear las señales de los teléfonos y ubicar las coordenadas de los soldados para atacarlos.
«Por el momento, se están tomando todas las medidas necesarias para evitar accidentes trágicos similares en el futuro. Con base en los resultados de la investigación, los funcionarios responsables rendirán cuentas», concluyó. (Sputnik)
